No es que sea precisamente ningún secreto que la inmensa mayoría de los conductores españoles basan su relación con la Dirección General de Tráfico en las acciones que han recibido a la hora de conducir su coche a su moto.

Y es que, si bien es cierto que la principal razón de ser de este organismo es la de ir mejorando constantemente la seguridad en nuestras carreteras y en los núcleos urbanos, las multas suelen ser el único punto que relaciona a muchos conductores de nuestro país con este organismo.

Es por eso que no han sido pocos los que se han alegrado de una decisión que ha tomado en los últimos años la DGT, entre otras cosas porque, gracias a esta decisión, una de las multas más habituales en nuestro país ha pasado a mejor vida.

La app de la DGT evita una de las sanciones más comunes

Si bien es cierto que la mayoría de sanciones que se producen en nuestro país van asociadas al uso del teléfono en el coche o a superar la velocidad máxima permitida en cierta vía, han sido muchos los conductores los que han visto, alguna vez han tenido alguna sanción por no llevar el carnet de conducir encima.

Por suerte, la entrada en juego de las nuevas tecnologías ha permitido que la DGT lance una aplicación llamada m DGT en la que, entre muchas otras cosas, se puede encontrar en ella una copia digital del carnet de conducir, por lo que evidentemente ya no es necesario llevar el permiso de circulación físico con nosotros cuando cogemos el coche o la moto.

 

Eso sí, evidentemente, lo que sí que tendremos que tener es batería en el móvil para, en el caso de que nos para una gente de la circulación, podamos mostrarle nuestro permiso a través de esta aplicación del teléfono móvil. En caso de no poder hacerlo la sanción sí que se llevará a cabo.

Por otro lado, cabe destacar también que dentro de la aplicación de la DGT podemos encontrar también información interesante acerca de nuestro vehículo así como, entre otras cosas, saber si estamos o no al día en cuanto al pago de las sanciones, si es que hay alguna pendiente. Una herramienta más que interesante para, sobre todo, evitarnos el disgusto de ver cómo nos sancionan por no llevar, por el motivo que sea, el permiso físico encima.