Los que tienen a la ciencia ficción como uno de sus géneros literarios o del cine como uno de sus géneros favoritos sabe muy bien que en este tipo de películas suele ser muy habitual ver, especialmente en aquellas que están ambientadas en un futuro, coches voladores.
Este sentido, no es que sea precisamente ningún secreto que hace unas décadas, a finales de los años 70 y 80, imaginaban nuestro tiempo como un tiempo en el que los coches voladores serían lo habitual. Pero lo cierto es que evidentemente estamos muy lejos de esta realidad imaginada.
Eso sí, cabe tener en cuenta que se están llevando a cabo importantes avances en este sentido, y uno de los más importantes ha llegado precisamente en Estados Unidos, donde el primer coche volador ha recibido la primera licencia de este tipo.
La primera licencia concedida a un coche volador en Estados Unidos
No es otro que el Alef Model A, el primer prototipo de la empresa Alef Aeronautics que lleva ya muchos años trabajando en este modelo. De hecho, fue en 2016 cuando se empezó hablar de este modelo, un coche eléctrico que podría despegar en cualquier momento y que tendría una autonomía de unos 170 km a través del aire.
Fue este modelo el que abrió sus libros de pedidos en octubre del pasado año, acumulando casi 500 reservas pese a que su precio de partida rondan los 300.000 $. Lo mejor en este caso es que, más allá de que se trate de un avance significativo y que pueda marcar un antes y un después, desde el fabricante ya han asegurado que están trabajando en un nuevo modelo, un modelo que se quedará por debajo de este Model A, el llamado Model Z, y que tendrá, sobre todo, un precio más comedido.
Por mucho que sea un directo que se encuentra en una fase muy embrionaria, el hecho de que el fabricante ya tenga la licencia asegura que su futuro está más cerca de hacerse realidad. Así, desde el fabricante aseguran también que el precio de este nuevo modelo podría rondar los 35.000 $, y que tendría un autonomía en vuelo más de 300 km, pudiendo además transportar hasta seis personas en este modelo.
Evidentemente sigue siendo algo que parece fruto de los mejores argumentos de la ciencia ficción, pero cada vez son más los que, viendo iniciativas como estas, asegura que los coches voladores están más cerca de lo que creemos.