El Smart #5 Brabus se presenta como el SUV eléctrico más potente de la marca, combinando un diseño sofisticado con unas prestaciones que lo sitúan en el territorio de los deportivos de alto nivel. Su sistema de propulsión desarrolla 646 CV, permitiéndole acelerar de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos gracias a la tracción total y a la gestión electrónica de alto rendimiento.
La batería, con una capacidad de 100 kWh, utiliza una arquitectura de 800 V que admite cargas ultrarrápidas de hasta 400 kW. Esto le permite pasar del 10 % al 80 % de carga en apenas 18 minutos, mientras que la autonomía homologada alcanza los 540 kilómetros en ciclo WLTP. Estas cifras lo convierten en una alternativa real frente a modelos eléctricos de mayor tamaño y precio.
El precio de lanzamiento parte de más de 60.000 euros al contado, lo que, teniendo en cuenta sus especificaciones y dotación, lo coloca en una posición competitiva dentro de los eléctricos de altas prestaciones. A nivel estético, incorpora elementos propios de la colaboración con Brabus, como llantas Monoblock Z de 21 pulgadas, paragolpes específicos y detalles en acabado oscuro que refuerzan su carácter deportivo.
Equipamiento y enfoque premium
En el interior, el Smart #5 Brabus ofrece un ambiente minimalista y tecnológico. Destacan las dos pantallas OLED de 13 pulgadas, el sistema de sonido de alta fidelidad, el techo panorámico, los asientos delanteros calefactables y ventilados, el acceso sin llave y la iluminación ambiental configurable. Los materiales empleados y el ajuste general refuerzan su posición como un producto de corte premium.
Lo destacable en este caso es que, pese a su imagen de vehículo exclusivo, su precio y características lo convierten en una propuesta con una relación entre prestaciones, tecnología y coste difícil de encontrar en su categoría. La combinación de potencia, autonomía y carga ultrarrápida le otorga un perfil versátil, apto tanto para un uso diario exigente como para disfrutar de la conducción deportiva.
En este sentido, el Smart #5 Brabus redefine el concepto de SUV eléctrico de lujo compacto, aportando un equilibrio poco habitual entre rendimiento extremo, eficiencia y equipamiento. Su planteamiento confirma que, en el mercado actual, es posible ofrecer un vehículo de altas prestaciones con un coste ajustado en relación a lo que ofrece.