Audi recuperará el nombre TT con un concepto que rompe con todo lo conocido hasta ahora. Bautizado como Audi TT Moment 2.0, el prototipo adelanta la cuarta entrega de un modelo que en sus tres generaciones anteriores había mantenido la esencia de un deportivo compacto de dos puertas. Esta vez, sin embargo, la marca confirma que el concepto crecerá en dimensiones y que su misión será distinta: ya no será “el mismo TT de siempre”, sino un proyecto con un enfoque renovado.
La compañía admite que el diseño y el propósito del nuevo modelo representan un cambio radical. El propio director de la firma ha señalado que el futuro deportivo se situará “entre el TT y el R8” en cuanto a proporciones, un aumento de tamaño que lo alejará del concepto original. El tiempo y los costes de mantener en producción el TT clásico habían hecho mella en la gama, y Audi decidió pausar su continuidad para replantear su papel en el catálogo.
El concept verá la luz en el Salón de Múnich 2025, momento en el que se desvelará si el modelo definitivo será completamente eléctrico o si incorporará alguna versión con motor de combustión. No es ningún secreto que la tendencia de la marca apunta hacia la electrificación, pero la incógnita sobre una posible hibridación se mantendrá hasta su presentación oficial.
Un nuevo papel para el TT en la gama de Audi
La llegada de este prototipo coincide con un proceso de renovación profunda en los deportivos de Audi. El fabricante ha cesado la producción del R8 y también de los Audi A5 Coupé y Cabrio, quedando sin referencias claras en el terreno de los modelos de nicho. Lo destacable en este caso es que el nuevo TT nace con la responsabilidad de llenar ese vacío, aportando un producto aspiracional que combine diseño emocional y la tecnología más avanzada.
En términos de estilo, el TT Moment 2.0 apostará por una carrocería más larga y con mayor distancia entre ejes, reflejando su cambio de orientación. Se espera un diseño más musculoso, con guiños al pasado pero con un lenguaje completamente contemporáneo que marcará la nueva etapa de los deportivos de la marca.
Llama especialmente la atención la contundencia con la que Audi avisa de que “el TT de siempre es historia”. Este nuevo modelo no pretende ser un simple heredero, sino el inicio de un ciclo distinto que busca mantener viva la carga simbólica del nombre mientras asume la transformación hacia un concepto de deportivo más versátil, global y adaptado a la electrificación que dominará la próxima década.