Como bien saben todos aquellos que suelo utilizar su coche o moto a diario y, como también sabes los que lo hacen de forma puntual, el precio de la gasolina y el diésel se ha convertido en uno de los principales motivos de preocupación.
Entre otras cosas porque, a diferencia de lo que ocurría hace ya mucho tiempo, cuando los precios eran mucho más estables, en los últimos tiempos la fluctuación ha sido enorme.
Debido a las diferentes crisis tanto nivel mundial como a nivel europeo que han sucedido los últimos tiempos, entre ellas la de la pandemia y el conflicto en Ucrania, el precio de la gasolina y el diésel en diferentes puntos de la geografía europea se ha disparado mucho en los últimos tiempos.
Si bien es cierto que hoy en día se puede encontrar precios en las gasolineras que ya son los mismos que podíamos encontrar antes del inicio de la guerra en Ucrania, acabo de sacar que siguen siendo dos precios mucho más altos de los que podríamos encontrar hace apenas unos años. Pero el problema en este caso es que, como apuntan algunos expertos, este momento actual en el que parece que los precios se han estabilizado está muy cerca de acabarse, por lo que es probable que llegue de nuevo un aumento de los precios.
Con la llegada del verano los precios de la gasolina aumentarán
En este sentido, todo apunta que, aunque quizás no sea el mismo nivel respecto al pasado verano, cuando llegó a superarse el precio de los dos euros por litro tanto en lo que se refiere a la gasolina como el diésel, parece ser que, a medida que se vayan acercando los meses vacacionales, los precios de la gasolina van a aumentar, entre otras cosas porque también aumentará la demanda.
A todo ello debe unirse también el hecho de que el conflicto en Ucrania sigue más que vigente, por lo que la situación no ha cambiado respecto al pasado de lado. Falta saber ahora hasta qué punto los precios de la gasolina y el diésel van a aumentar y si van a llegar a estar tan altos como lo estuvieron el pasado verano, así como si este aumento va a ser progresivo o va a ser radical e inminente.
Lo que sí que parece evidente es que, mientras que ahora nos encontramos en un momento de pausa, tal y como han ido anticipando los últimos meses varios expertos, los precios de la gasolina y el diésel van a aumentar de forma considerable en los próximos meses, algo que evidentemente no es una buena noticia.