Tras la buena jornada anterior, el Ibex y el Eurostoxx parecen determinados a consolidar los resultados alcanzados la víspera iniciando la sesión con un descenso del 0,6%. La cuota de los 8.500 puntos en el Ibex no es segura, pero podría mantener el nivel. 

Hoy hay pocas referencias macroeconómicas, a excepción del crecimiento de la economía alemana, que ha ascendido a un 0,4% en el segundo trimestre, con un crecimiento interanual del 3,1%, según lo esperado.

La Bolsa de Milán se está comportando como el resto de los parquets europeos aun cuando se haya producido un terremoto en el Lacio provocando 38 muertos contabilizados, numerosos heridos, y el desplome de edificios. 

En Asia, Corea del Norte ha disparado un misil desde un submarino hacia Japón, pero el índice Nikkei ha hecho caso omiso a la agresión y ha subido un 0,61% al ascender el índice líder hasta 99,2 y depreciarse el yen.

El euro ha bajado a 1,1290 dólares mientras Benoit Coure, del BCE, ha dicho que el Banco Central Europeo podría tener que aplicar más estímulos ante la parálisis de los gobiernos.

El Brent también ha corregido hasta 49,40 dólares. Irak ha manifestado que está lejos de alcanzar la cuota que le corresponde en el mercado de crudo.

Y en Wall Street, donde ayer un buen dato de viviendas nuevas, con un crecimiento de dos dígitos en julio, hoy toca la evolución de las ventas de viviendas de segunda mano. Los futuros del S&P caen un 0,05%. 

Parece que viene una jornada de corrección tenue.