El Ibex ha subido un 1,33% en una sesión muy positiva, tanto a nivel propio como en Europa y Wall Street. Llegar a 8.580 puntos tras unas jornadas difíciles lleva al índice español a zona templada tanto en bolsa como en el mercado de deuda.

El Tesoro ha colocado 3.305 millones a tipos con mayor margen negativo en letras a tres meses (-0,346%) y nueve meses (-0,253%) coincidiendo con informaciones que señalan que la obra pública ha descendido un 20%  en el primer trimestre. Pero, a su vez, en julio, la ocupación hotelera ha sido del 72,9%, un 6% más.

En Europa también van bien las cosas. La actividad del sector privado se ha mantenido en forma, con un crecimiento de 53,3 puntos aun cuando la confianza del consumidor de la eurozona haya mostrado decaimiento, hasta retroceder de forma preliminar un 8,5% en agosto.

Esta reacción en conjunto positiva se está sobreponiendo al ajuste de precios en el petróleo y a las dudas que rodean a la Reserva Federal. El sector privado muestra una resistencia significativa, que va más allá de los Ejecutivos y los bancos centrales. El número de viviendas nuevas iniciadas en julio en EEUU ha ascendido a 654.000, muy por encima de lo esperado. El verano le está sentando bien a la economía global.