El Ibex ha abierto con una subida del 0,4%, con el Eurostoxx ligeramente por encima, en una sesión en que el dinero parece acercarse a las bolsas europeas por decepción relativa de Wall Street.

En Asia, el Nikkei ha permanecido cerrado porque se celebra en Japón la Fiesta de la Montaña y el petróleo Brent ha retrocedido hasta 43,98 dólares tras noticias relativas a que la producción de Arabia saudí está en récords, con 10,67 millones de barriles, y Kuwait está bajando los precios a mínimos en cuatro meses.

Fuera del Ibex, Abengoa ha anunciado un acuerdo con los acreedores para la reestructuración de la deuda. Los fondos para su recapitalización ascenderán a 1.170 millones de euros, a través de una ampliación de capital por un total de 204.081 acciones B. El título subía desde la preapertura.

En Europa, el IPC ha caído un 0,4% en Francia en julio y en Alemania Deutsche Telekom ha mostrado unos resultados que reflejan una caída de beneficios del 18% en el segundo trimestre.

En el desorden de agosto, Renzi está tratando de desvincular el resultado del referédum con su permanencia en el gobierno con lo que el riesgo general en Europa se ha reducido. Ello lleva a la prima de riesgo española a 106 puntos básicos.

En este entorno de expectativas económicas reducidas al desdibujarse el buen dato de empleo americano de principios de mes, el foco de los inversores se ha desplazado hacia la deuda. El rendimiento (lo que tiene que pagar) el bono español a 10 ha descendido al 0,95%. Y no sólo ocurre eso aquí. El rendimiento del bono americano a 10 años (el Treasury) está a 1,53% al haber aumentado su demanda. 

Ahora, algunas acciones de las que el mercado rehuía parecen buenas. Esta tendencia también ayuda a la banca española, que está recuperando parte de su valor real.