El estado de Virginia ha aprobado la abolición de la pena de muerte con una mayoría en las dos cámaras legislativas. Al hacerse oficial, Virginia se convertirá en el primer estado del sur al conseguir prohibirlo, rompiendo con una práctica centenaria de los Estados Unidos.

Después de las votaciones al principio de febrero, donde senadores y delegados posicionaron en mayoría a favor de la prohibición de esta práctica, la ley todavía tiene que ser formalmente adoptada por el gobernador demócrata Ralph Northam, quien ya ha posicionado en contra de este castigo "inequitable, ineficaz e inhumano" y terminará el trabajo en los próximos días.

Sentencia contra la pena de muerte

Una vez eliminada esta práctica, que en Virginia se remonta en el año 1608, el estado sureño será el 23.º estado al abolir las ejecuciones, y, crucialmente, el primero a romper con sus vecinos sureños, que todavía siguen con la tradición.

A lo largo de estos 400 años de historia, el estado ha ordenado la ejecución de casi 1.400 personas. De hecho, Virginia cuenta con el porcentaje de condenados al 'corredor de la muerte' más alto de los Estados Unidos. En términos de ejecuciones, el estado de Virginia es el segundo con el número más alto, ya que desde 1976 ha ejecutado 113; el primero es Tejas.

Un cambio estructural

La abolición de la pena de muerte augura un cambio estructural dentro del sistema de Virginia, e ilustra la evolución de un estado que, a pesar del alud de ejecuciones durante la administración Trump, anhela el progresismo. De hecho, las elecciones en el gobierno de Virginia del 2019 dejaron, por primera vez, una mayoría demócrata al cargo del estado, marcando una nueva era la política del estado y el rechazo cabe al ahora expresidente Trump.

La composición demográfica del estado ha cambiado en las últimas décadas, y junto con la atmósfera de justicia racial en el país, el estado ha dado un paso adelante al abolir una práctica que agrava estas desigualdades. Las cifras hablan por sí solas, ya que el sistema penitenciario americano castiga inequitablement a los ciudadanos de color. El estado ha vivido varias instancias de ejecuciones masivas de convictos negros, y la pena de muerte es símbolo de la herencia violenta, colonial y esclavista del país.

Sin duda, esta reforma marca una nueva era en el avance hacia la justicia social, ya que la abolición de la práctica salvará la vida de los dos únicos convictos actualmente en el corredor de la muerte de Virginia. El un Thomas Porter, condenado por el asesinato de un policía, y el otro, Anthony Juniper, sentenciado por 4 asesinatos más. Los dos convictos, que ahora pasarán a cumplir cadena perpetua, son de raza negra.

 

Foto principal: Virginia, primer estado sureño el abolir la pena de muerte / Flickr