La Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha revelado hoy que la cifra confirmada de civiles víctimas de la guerra entre Rusia y Ucrania asciende a 21.965, entre muertos y heridos. Estas cifras, aunque alarmantes, se consideran conservadoras y únicamente incluyen los casos que han sido documentados con la estricta metodología que utiliza la ONU en situaciones de este tipo. Según la ONU, los civiles muertos en esta guerra han sido 8.231, mientras que los heridos se elevan a 13.734 entre la población no militar.

El grueso de las víctimas mortales, con un total de 6.372, se ha registrado en zonas controladas por el gobierno ucraniano, ya que han sido las zonas que han recibido las embestidas más fuertes del ejército ruso. En estas partes también se han registrado 11.247 personas heridas. Por otra parte, en las regiones de Ucrania ocupadas por Rusia, 4.346 personas (1.859 muertos y 2.487 heridos) han sido víctimas de la guerra.

La principal causa de las muertes de civiles es la detonación de armas explosivas con un amplio alcance, seguimientos de minas antipersonales. La ONU ha enfatizado en que estas cifras son conservadoras, lo cual sugiere que el número real de víctimas podría ser muy mayor. La ONU ha estado haciendo un seguimiento de las víctimas civiles desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania y según los datos aportadas por la organización, marzo de 2022 fue el mes donde más civiles murieron en esta guerra, y desde entonces la tendencia ha estado a la baja. Así y todo, la cantidad de víctimas sigue siendo alarmante y seguirá aumentando mientras dure la guerra.

La ONU ha instado en todas las partes involucradas en el conflicto a tomar medidas inmediatas para proteger a los civiles y garantizar que se respeten los derechos humanos. Asimismo, ha pedido el fin inmediato de los ataques a la población civil y el acceso seguro y sin restricciones de los trabajadores humanitarios a las personas necesitadas. A pesar de estas demandas, no parece que las fuerzas rusas estén dispuestas a rebajar la violencia de sus estrategias, que ponen en peligro la vida de miles de civiles.

Crece la tensión entre el Kremlin y el grupo Wagner

La tensión entre el Kremlin y el grupo mercenario Wagner va a más. El Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) dice que la tensa relación entre el Ministerio de Defensa ruso e Ievgeni Prigozhin, financiador del grupo Wagner, "probablemente ha llegado a su clímax" a medida que se va desarrollo la batalla por Bakhmut. Según el análisis de la organización, figuras importantes dentro del Ministerio de Defensa ruso están utilizando la batalla de Bakhmut para batir combatientes de Wagner y desafiar las "ambiciones de mayor influencia en el Kremlin" de Prigozhin. El análisis se produce cuando continúa la dura lucha por Bakhmut con las fuerzas rusas sin poder avanzar durante el fin de semana. Tanto Ucrania como Rusia han afirmado haber matado centenares de soldados a ambos bandos.

El Instituto constata que el Ministerio de Defensa ruso podría estar priorizando la eliminación de Wagner en los campos de batalla", hecho que concluye que está frenando su avance. En este sentido, ha dicho que el conflicto empezó cuando Prigozhin llevó a cabo una campaña de "difamación implacable" contra figuras importantes del ejército ruso, incluyendo el ministro de Defensa Serguei Xoigú y la jefe del Estado Mayor ruso Valeri Gerasimov.