Las últimas horas en Bruselas son frenéticas. A estas alturas, la policía sigue trabajando intensamente en la identificación y detención de los autores de los atentados, que ayer acabaron con la vida de una treintena de personas y dejaron un centenares de heridos. Ha sido una mañana de bastante confusión, donde se ha filtrado en algunos medios belgas la detención de Najim Laachraoui, quien sería el tercer sospechoso identificado gracias a las camaras de seguridad del aeropuerto y que consiguió huir después de las explosiones. Però al mediodía el Fiscal del país ha comparecido en rueda de prensa para explicar que hay la detención de una persona relacionada con los hechos, pero que ésta no es Laachraoui.

Las autoridades belgas no lo han querido confirmar, pero todos los medios del país apuntan a que Najim Laachraoui es uno de los sospechosos del atentado de ayer en la capital belga. Según estas fuentes, él podría ser el cerebro de los atentados de ayer y también quien fabricó los explosivos. Además, estaría muy relacionado con atentados de París del pasado mes de noviembre.

Ayer, sin embargo, la bomba que supuestamente llevaba encima Laachraoui no acabó explotando. Según el Fiscal, éste era el mayor cargamento de explosivos que llevaban los terroristas. La bomba fue finalmente detonada de una manera controlada por los cuerpos de seguridad belgas, y no causó ningún herido.

Un cuarto sospechoso no identificado

El Fiscal también ha dado más detalles sobre el resto de personas implicadas en los atentados. Se trata de dos hermanos nacidos a Bruselas y de nacionalidad belga, Jalid y Brahim El Bakraoui, que se habrían inmolado ayer, uno en el aeropuerto y el otro en la estación de metro de Maelbeek. Los dos eran conocidos por la justicia del país y ya habían estado a la prisión, pero no por vínculos con el terrorismo.

Habría todavía un cuarto sospechoso, uno de los hombres que se ven en la fotografía difundida por la policía belga y que se habría inmolado ayer en el aeropuerto, que todavía no habría podido ser identificado. La fiscalía no ha querido dar más detalles sobre la investigación para no perjudicar el transcurso de la investigación y ha asegurado que sólo hablaría cuando la información esté muy verificada y contrastada.

Fotografía de los sospechosos. Uno de los dos que van vestidos de negro todavía no estaría identificado

El testigo del taxista que llevó a los presuntos terroristas hasta el aeropuerto ha sido clave para identificarlos. Los tres hombres habrían cogido un taxi desde el piso inspeccionado ayer en el barrio de Schaarbeek con la intención de cargar cinco maletas con explosivos. Sin embargo, finalmente sólo se habrían llevado tres, ya que no había suficiente espacio dentro del vehículo.

Según las primeras informaciones, la detención de Abdeslam a finales de la semana pasada habría precipitado los atentados, que ya estarían planeados, por miedo a que Abdeslam los pudiera delatar.

El mensaje de uno de los terroristas

La fiscalía belga también ha confirmado que uno de los terroristas inmolados ayer en Bruselas habría dejado una nota donde afirmaba que no quería acabar en la prisión como Salah Abdeslam, detenido el viernes pasado como uno de los cerebros de los atentados de París el pasado mes de noviembre.

Relación con Abdeslam

Los tres sospechosos tendrían relación con Salah Abdeslam, el cerebro de los atentados de París detenido el viernes pasado en la capital belga. Según los medios belgas, uno de los dos hermanos, Khalid, habría alquilado con una identidad falsa una habitación en la calle Dries de Forest, escenario de un tiroteo con la policía el 15 de marzo. En este piso se habría escondido durante días Abdeslam.

El tercer sospechoso también habría tenido relación con Abdeslam, ya que fue identificado con él en un coche al atravesar la frontera de Hungría, el pasado mes de septiembre. Además, según Le Figaro, su ADN se encontró en dos pisos de París y en varios cinturones explosivos utilizados en los atentados en la capital francesa. De 24 años y bajo el falso nombre de Soufiane Kayal, era buscado desde el pasado mes de diciembre por la policía francesa. Se cree que Najim Laachraoui habría tenido un papel decisivo en los ataques del 13 de noviembre en la París.

Según las primeras informaciones, la detención de Abdeslam a finales de la semana pasada habría precipitado los atentados, que ya estarían planeados, por miedo a que Abdeslam los pudiera delatar.