"Estamos en Bucha. Nuestra defensa está estancada, estamos perdiendo esta guerra". "Nos han dado orden de matar a todas a las personas que veamos". "Putin es un idiota". "Quiere tomar Kyiv, pero no hay manera de hacerlo". Estas son algunas de las frases que los soldados rusos pronunciaron en llamadas a familiares, parejas y amigos, en el mes de marzo, semanas después de que el Kremlin iniciara la ofensiva en Ucrania. Estas conversaciones fueron interceptadas, como otras miles de conversaciones telefónicas por parte del gobierno ucraniano. Y este miércoles han sido reveladas por el The New York Times, en un reportaje en el cual se revela la frustración y el desencantamiento de las tropas de Vladímir Putin, unas conversaciones en que critican la gestión de la guerra por parte de Putin, las pésimas condiciones de sus regimientos o la dificultad para hacer frente a las tropas ucranianas.

La peor decisión de Putin

"Mamá, esta guerra es la peor decisión que ha tomado nuestro gobierno. ¿Cuándo acabará todo eso Putin? Joder", así lo expresó un militar ruso a su madre, que respondió admitiendo que en Rusia los medios explicaban que todo iba "de acuerdo con el plan". Gracias a estos audios también se puede avistar las pérdidas que estaban registrando las Fuerzas Armadas rusas al inicio de la guerra. Un soldado del 331 regimiento aerotransportado informó que todo el segundo batallón de 600 soldados había sido aniquilado. "Hay cadáveres por todos los lados. Los civiles están tirados por aquí. Está jodido", explica otro soldado a su pareja. Y a un amigo: "Todo fue saqueado, se bebió todo el alcohol y desapareció todo el dinero".

Estos audios permiten entender la situación del frente por parte de las tropas rusas, y han sido verificados por el The New York Times cruzando los números de teléfonos rusos con aplicaciones de mensajería, un proceso que les ha llevado dos meses. En las conversaciones participan decenas de militares de unidades aerotransportadas y de la guardia nacional rusa. En estas llamadas telefónicas a amigos y familiares en casa, los soldados rusos ofrecieron relatos internos condenatorios de los fracasos en el campo de batalla y de las ejecuciones de civiles, además de criticar al mandatario ruso pocas semanas después de que tuviera inicio la invasión de Ucrania.

Soldados engañados

"Nadie nos dijo que íbamos a una guerra, solo nos avisaron el día antes de dejar nuestra casa", comenta uno de los soldados. "No sabía que esto iba a suceder. Dijeron que íbamos a un entrenamiento. Estos cabrones no nos dijeron nada", señala otro. "Nos tomaron el puto pelo como criaturas". Los soldados describen así la crisis moral y la falta de equipamiento de las tropas rusas, que escenifica la retirada de Rusia en varios territorios de Ucrania ante la incapacidad de hacer frente a los ataques. En otro de los audios publicados por The New York Times indica que en lugar de atacar se ven obligados a defenderse. "Los tanques y los blindados están quemando. Han volado los puentes y las presas. Los caminos están inundados y ahora no podemos movernos", continúa. "Quieren engañar a la gente en la tele diciendo que todo está bien, que es solo una operación especial, pero en realidad es una puta guerra", de esta manera le relata la situación un soldado a su pareja.

Sobre la matanza de Bucha, donde se encontraron más de 1.100 cadáveres en fosas comunes que demuestran los crímenes de guerra que ha cometido Rusia durante esta guerra en Ucrania: "Los detuvimos, los desnudamos y comprobamos su ropa. Tuvimos que decidir si soltarlos, pero si lo hacíamos podían revelar nuestra posición, así que se decidió dispararlos en el bosque", relata un soldado. Durante la conversación, su pareja le pregunta si los dispararon, él contesta que "por supuesto". Ella insiste en por qué no los han hecho prisioneros, la respuesta del soldado es contundente: "Tendríamos que haberlos alimentado y no tenemos suficiente comida para nosotros".