Estados Unidos vuelve a salir al paso por Alekséi Navalni. El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ha expresado este sábado su preocupación por la opacidad sobre el paradero del líder opositor ruso y ha exigido en el Kremlin que sea liberado cuanto antes mejor. "Estamos profundamente preocupados por el paradero de Alekséi Navalni, que hace casi tres semanas que está desaparecido en el sistema penitenciario de Rusia", ha afirmado la cabeza de la diplomacia estadounidense en las redes sociales. En la misma publicación, Blinken ha vuelto a exigir "la liberación inmediata" de Navalni y que el gobierno del presidente ruso, Vladímir Putin, deje de reprimir a las voces independientes en Rusia".

Alekséi Navalni, en paradero desconocido

El opositor ruso Alekséi Navalni se encuentra en paradero desconocido desde hace casi 3 semanas. El pasado 12 de diciembre el Kremlin confirmó que desconocen el lugar donde se encuentra Navalni, que cumple una condena de casi 30 años. El entorno del político denunció entonces que hacía una semana que no contactan con él. Y sus abogados tampoco han tenido contacto con su cliente desde el 5 de diciembre. Sin embargo, desde el gobierno ruso se afirma que no saben dónde está, aunque el sistema de prisiones recae en sus manos. "No, nosotros no tenemos ni intención ni posibilidad de conocer la suerte de los presos y los detalles de su estancia a las correspondientes instituciones penitenciarias", afirmó Dmitri Peskov, portavoz presidencial.

Las alertas saltaron cuando Navalni no se presentó a una vista judicial. Su entorno ha tratado de recaudar información para saber dónde se encuentra el líder opositor ruso, pero ha sido inútil. De momento, la única cosa que se sabe sobre su situación es que ha sido evacuado de la prisión de máxima seguridad donde cumplía hasta ahora condena. Los servicios penitenciarios rusos confirmaron esta información, y añadieron que "sobre la llegada de Navalni al nuevo destino se informará en el marco de la legislación vigente". Según algunos miembros del equipo de Navalni, el opositor habría sido trasladado a una nueva prisión después de anunciar una campaña contra la reelección del presidente Vladímir Putin. Con todo, el proceso del traslado puede prolongarse semanas, tiempo en el cual el recluso acostumbra a estar incomunicado.

Preocupación por el estado de Navalni

La ONG Amnistía Internacional (AY) ha alertado de que Navalni podría ser víctima de una "desaparición forzosa". El subdirector de la organización para Europa del Este y Asia Central, Denis Krivosheev, ha señalado así que Navalni, en el cual considera a un "preso de conciencia" ya no se encuentra oficialmente en la lista de presos de la colonia penal. "Por si no fuera lo suficiente un intento de envenenamiento o un encarcelamiento en condiciones inhumanas, Navalni podría estar siendo ahora sujeto a una desaparición forzosa", ha dicho, antes manifieste que "se desconoce de momento su paradero". Por su parte, la relatora de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Rusia, Mariana Katzarova, ha expresado "estoy sumamente preocupada por el hecho de que las autoridades rusas no den indicios sobre el paradero de Navalni y ni su estado físico durante tanto tiempo".

En paralelo, el tribunal ruso, que examina las quejas del dirigente opositor Alekséi Navalni para el trato recibido en la prisión, ha paralizado los procedimientos después de una nueva incomparecencia. Su principal portavoz, Kira Yarmish, confirmó hace unos días a las redes sociales la paralización de las sesiones—hoy tenía previstas siete— hasta aclarar donde está Navalni que habitualmente participada por videoconferencia en este tipo de procedimientos. Sus abogados ya han consultado además de 200 centros penitenciarios de todo el país, hoy por hoy sin ningún tipo de respuesta.