La distancia entre Felipe VI y Juan Carlos I es más que evidente. Los escándalos del rey emérito español han maltrecho la institución real y su hijo hace años que intenta distanciarse de él. Tanto es así que las imágenes de los dos juntos se han convertido con el paso de los años en un fenómeno raro. Las distancias hace años que se guardan entre reyes y eméritos, pero el funeral de la reina Isabel II ha roto esta tendencia. Ni Felipe ni Leticia había coincidido con Juan Carlos y Sofía en las horas antes del funeral, llegando a visitar el féretro por separado. Ahora bien, hay partes del protocolo que no recaían en manos de La Zarzuela, sino de Buckingham. De manera, que la casa real española acabó sentada junta en las primeras filas, tal como exige el protocolo británico.
La primera imagen desde hace años en que aparecen Juan Carlos I, Sofía, Felipe VI y Leticia juntos lo ha dado el funeral de Isabel II y más concretamente el protocolo británico. Por estar emparentados con la reina británica, los Borbones ya podían esperar un lugar destacado. Además, las casas reales se sentaron juntas y en posiciones mucho más próximas en el féretro, como indica el protocolo británico, ya que se priorizaban por encima de otros jefes de Estado. La primera fila ocupada por las monarquías europeas la ocuparon los monarcas de Dinamarca, Suecia y Holanda. En la segunda, los reyes españoles compartían la fila con los soberanos de Noruega. En las últimas filas de la sección de casas reales europeas se encontraban miembros de las antiguas monarquías de Grecia, Bulgaria y Serbia.
Menos alejados del féretro que los monarcas europeos sin reino, estaban las monarquías del resto del mundo, como por ejemplo el emperador de Japón, Naruhito. En posiciones mucho más lejanas se encontraban algunos de los líderes mundiales más destacados, como Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, o Emmanuel Macron, presidente de Francia. Puede parecer a primera vista algo extraño, pero se trata del funeral de una reina, por eso monarquías y soberanos de todo el mundo disfrutan de prioridad protocolaria, incluso si esta les supone dar una imagen que hacía años que esquivaban, como en el caso de los Borbones.
El nada de España y los eméritos, juntos a la ceremonia funeraria de Isabel II / Foto: Europa Press
Felipe VI, el representante
Desde que se murió la reina Isabel II se puso en duda la participación de Juan Carlos I, ya que el emérito tiene una demanda en el Reino Unido impuesta por su examante Corina Larsen. A pesar de todo, fue invitado. Un hecho que fue un descalabro en La Zarzuela y La Moncloa. Desde el Ejecutivo español, se quiso dejar muy claro que aunque coincidieran los reyes eméritos y los actuales monarcas, los representantes del Estado eran Felipe VI y Letizia.