El último Informe sobre Piratería y Robo Armado elaborado por la Oficina Marítima Internacional (IMB) revela un preocupante incremento en el número de incidentes a los mares del mundo durante el año 2023. Entre los datos más destacados, se registra el primer secuestro efectivo en aguas de Somalia desde 2017. Según la IMB, se contabilizaron un total de 120 incidentes de piratería marítima y robo armado en el 2023, en comparación con los 115 registrados en el 2022. Estos incidentes incluyen 105 abordajes, nueve intentos de ataque, cuatro embarcaciones secuestradas y dos que recibieron tiros de piratas, pero que no fueron asaltadas.
Lo más alarmante es el incremento de la violencia contra las tripulaciones de las embarcaciones afectadas. El número de tripulantes presos como rehenes se ha elevado de 41 a 73. Además, mientras que en el 2022 dos tripulantes fueron secuestrados, esta cifra se disparó en 14 en el 2023. Diez tripulantes fueron amenazados, cuatro resultaron heridos, y uno fue agredido. El director de la IMB, Michael Howlett, ha expresado su preocupación por el hecho de que piratas somalíes hayan conseguido llevar a cabo el primer secuestro exitoso desde el 2017. "Este es un motivo de preocupación", señala Howlett en un comunicado, instigando a los comandantes de los barcos a seguir las recomendaciones y procedimientos de seguridad.
El incidente más notable ocurrió el 14 de diciembre, cuando presuntos piratas somalíes abordaron y secuestraron el barco mercante búlgaro con bandera de Malta 'MV Ruen' a 700 millas náuticas al este de la ciudad de Bosaso, en Somalia. Desde entonces, se desconoce la localización del barco, excepto que uno de los tripulantes fue evacuado para poder recibir atención médica y que la embarcación fue trasladada hacia costas de Somalia.
Como respuesta al secuestro, la fragata 'Victoria' del ejército español, desplegada a la Operación 'Atalanta' de la UE contra la piratería en el océano Índico, se dirigió a la zona donde se perdió el contacto con el 'MV Ruen'. España lidera actualmente esta operación, que la Unión Europea lanzó en el 2008 para hacer frente a la amenaza de los piratas somalíes. El Gobierno, liderando la Operación 'Atalanta', ha sostenido que la naturaleza del actual la amenaza de los hutís en el mar Rojo es diferente y más desafiadora, y se ha rechazado la propuesta de extender la misión en esta área. No obstante, el informe destaca que la piratería sigue siendo un riesgo en las aguas delante de Somalia. Este aumento de la piratería, según el informe, plantea retos significativos para la seguridad marítima y destaca la necesidad urgente de medidas efectivas para salvaguardar las vidas de las tripulaciones y garantizar la navegación segura en las aguas internacionales.