Castristas y anticastristas se han enfrentado hoy ante la embajada de Cuba en Madrid durante las dos concentraciones que han confluido en el paseo de La Habana de la capital con motivo de la muerte de Fidel Castro.

La Policía ha tenido en algún momento que separar a personas de uno y otro bando cuando han llegado incluso a las manos durante una concentración que aún prosigue bajo la lluvia y en la que se han proferido insultos tanto a los opositores al régimen castrista que viven en España, como a los afines al Gobierno de la isla.

La bandera de la embajada ondea a media asta y numerosos medios de comunicación se han desplazado hasta la sede de la legación cubana para recoger el testimonio de los concentrados, la mayoría de ellos procastristas.

Separar a los dos grupos

Agentes de la Policía han separado a los dos grupos y han requisado al presidente de Cuba Democracia Ya, Rigoberto Carceller, botellas de champán con las que quería brindar "no por la muerte de Fidel, al que Dios perdone", sino porque hoy "empieza una nueva etapa para los cubanos".

"Cuba, Fidel y el Che" y "La revolución vive" son algunos de los lemas que están coreando los concentrados. Mientras unos han alabado los progresos sociales en educación y sanidad del régimen castrista, otros lo han tachado de "dictadura" y han criticado a los españoles que apoyan a ese Gobierno porque "sólo les interesa ir a la isla a disfrutar", según los testimonios. 

Bajo el lema "Cubanos, Castro ha muerto" –con el símil de las palabras que utilizó Carlos Arias Navarro para anunciar en 1975 las palabras del exdictador español Francisco Franco–, la oposición busca celebrar la muerte del comandante. 

El funeral, hoy

"En cumplimiento de la voluntad expresa del compañero Fidel, sus restos serán cremados en las primeras horas de mañana, sábado 26", ha continuado.

Asimismo, ha señalado que la comisión que organizará los funerales dará más información detallada sobre "el homenaje póstumo que se le tributará al fundador de la Revolución Cubana". "¡Hasta la victoria siempre!", ha finalizado.

Castro, que cumplió los 90 años el pasado mes de agosto, gobernó en la isla desde 1959, después de que la Revolución triunfara con la expulsión de Fulgencio Batista del poder. En el 2008 se retiró, dejando al mando del Gobierno del país a su hermano, debido a una enfermedad de la que nunca se ofrecieron detalles. Su última aparición en público fue, precisamente, con motivo de su cumpleaños, el pasado 14 de agosto.