Ya hace tiempo que ha quedado claro que la invasión rusa en Ucrania traería cola. O cuando menos, que no se trataba sólo de un conflicto entre dos países. Y eso, podría estar materializándose todavía más. Dos explosiones han destruido este martes dos antenas de un centro de radiotelevisión en la localidad de Grigoriopol a la autoproclamada república moldava de Transnistria, ha informado el Ministerio del Interior de este territorio. Hay que recordar que Transnistria es un estado independiente de facto, no reconocido por la comunidad internacional, situado entre Moldavia y Ucrania. Según parece y recoge el digital moldavo Politika.md, las explosiones se habrían producido a primera hora de la mañana y no se ha informado de víctimas mortales. "La primera explosión ha pasado en torno a las 6.40 horas y la segunda a las 7.05 horas, han destruido dos antenas potentes del centro de radio Maiak", se ha precisado. Según las autoridades de Transnistria, las antenas destruidas se utilizaban para retransmitir las señales de las radios rusas. El atentado contra el centro de radiotelevisión de Grigoriopol es el segundo perpetrado en el territorio de Transnistria en menos de 24 horas.

Ataque al Ministerio de Seguridad de Transnistria

Este lunes desconocidos atacaron con lanzagranadas la sede del Ministerio de Seguridad del Estado de Transnistria, según ha denunciado el Ministerio del Interior en la cuenta de Telegram. Al atentado, perpetrado en el centro de Tiraspol, capital de Transnistria, se lanzaron al menos tres proyectiles, que ocasionaron daños materiales tanto en la sede ministerial como en los edificios de los alrededores, sin que se reportaran víctimas.

La Oficina del Gobierno moldavo para el Reintegro expresó su preocupación por las explosiones de este lunes, y ha dicho que la información disponible indica que "el objetivo del incidente era crear pretextos para una escalada de la situación de seguridad en la región de Transnistria, que no es controlada por las autoridades constitucionales". Transnistria, territorio de casi medio millón de habitantes, la mayoría eslavos, rompió los lazos con Moldavia después de un conflicto armado (1992-1993) en que contó con ayuda rusa.

Desde el final de aquella contienda, que costó la vida a centenares de personas, Moldavia aboga por la integración de los dos territorios divididos por el río Dniéster, a lo cual siempre se han negado los separatistas. En virtud del Acuerdo para la Solución Pacífica del conflicto de Transnistria firmado en julio de 1992, Rusia emplazó a 2.400 efectivos para garantizar la paz en la zona, pero fue reduciendo este contingente a lo largo de los años.

Moldavia convoca al Consejo de Seguridad

La cosa, pues, podría escalar. Posiblemente por este motivo, la presidenta de Moldavia, Maia Sandu, ha convocado este martes una reunión del Consejo Supremo de Seguridad a causa del agravamiento de la situación a la región de Transnistria, fronteriza con Ucrania. "Sandu ha convocado hoy una reunión del Consejo Supremo de Seguridad a causa de los incidentes a la región de Transnistria", ha informado la oficina de prensa de la Presidencia moldava. La reunión, añade el comunicado, se celebrará a las este mismo martes.

Poco antes de la convocatoria del CSS, el Servicio de Información y Seguridad (SEIS) de Moldavia ha informado de que sigue de cerca la situación en la región separatista de Transnistria, de mayoría rusófila. "Hacemos un llamamiento a la sociedad a la calma y a abstenerse de difundir informaciones de fuentes no verificables que instiguen el odio y la guerra", ha señalado el SEIS en un comunicado.

 

Imagen principal: Tiraspol, capital de Transnistria / Unsplash