2 elecciones atrás, ni siquiera consiguió el porcentaje necesario para entrar en el parlamento. Ahora, Naftali Bennett, se convertirá en el nuevo primer ministro de Israel. ¿Pero quién es y de dónde sale el sustituto de Binyamin Netanyahu?

Bennett nació hace 49 años en Haifa y es hijo de inmigrantes norteamericanos y seculares. Sin embargo su carrera siempre ha sido ligada a la derecha religiosa.

Después de 6 años en una de las unidades de élite del ejército israelí, se licenció en derecho y fundó a una start-up de ciberseguridad que acabaría vendiendo por más de 100 millones de euros. Con esta venta, como él mismo dijo "se podría haber pasado la vida tomando cócteles en el Caribe", pero decidió entrar en política.

En el 2006 se convierte en jefe de gabinete de Netanyahu, y desde aquel momento pasa a ser su protegido. Ocupará todos los cargos posibles en la política israelí: ministro de defensa, de educación, de economía... Incluso su hijo mayor Yoni se llama así en honor al hermano de Netanyahu, quien fue asesinado cuando liberaba a los pasajeros secuestrados en el aeropuerto de Entebbe, a Uganda.

Con los años, sin embargo, Bennett empieza a dudar de que Netanyahu sea capaz de aplicar las medidas conservadoras que él siempre ha defendido. Por eso, después de muchos altibajos, acabará creando la coalición de partidos Yamina, que en hebreo significa literalmente "a la derecha".

En este sentido, Bennett sigue la línea de liberalismo económico de Netanyahu, pero vira hacia una posición más dura en relación con los palestinos y más partidaria de la anexión de los asentamientos israelíes a Judea y Samaria. De hecho, siempre se ha mostrado claramente en contra de la solución de los dos estados. Tal como dijo en un spot de campaña: "Hay 2 cosas que la mayoría de nosotros sabe que no pasarán nunca: una es que no habrá una nueva temporada de los Soprano, y el otro es que tampoco habrá un plan de paz con los palestinos".

En cuestiones sociales, Bennett durante su etapa en el gobierno impulsó importantes medidas para introducir a la mujer árabe en el mercado laboral.

A pesar del endurecimiento de algunas de sus ideas, su gobierno de coalición es muy diverso y tendrá que hacer auténticos malabares para conseguir cierta estabilidad. El acuerdo de gobierno establece que el cargo de primer ministro es rotatorio, y al cabo de dos años tendrá que ceder al cargo en Yair Lapid, el principal líder de la hasta ahora oposición.

Ahora bien, como con la política israelí nunca se sabe, dejaremos en Lapid para más adelante...