La actividad en la Unión Europea se reanuda después del paro de verano. Hoy se ha celebrado en Bratislava una nueva reunión del Consejo Europeo, con una particularidad: ya no está el Reino Unido, después de que el junio pasado los británicos decidieran abandonar el proyecto comunitario en un referéndum. Los veintisiete países tienen que abordar hoy los retos comunes que afronta el proyecto europeo y su futuro. Entre los temas principales: el Brexit, la crisis migratoria o la amenaza del terrorismo.

En la entrada de la reunión, la canciller alemana, Angela Merkel, ha alertado de la "situación crítica" que vive la Unión Europea. Aunque ha asegurado que "podemos mejorar", también ha querido dejar claro que no se podrán solucionar todos los problemas de la UE. Su homólogo italiano, Matteo Renzi, ha apostado por una UE menos "burocrática" y que se ocupe de las "cuestiones fundamentales", mientras que el presidente francés, François Hollande, ha pedido que se priorice la seguridad y "reforzar" las capacidades militares de la UE.

Por otra parte, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha manifestado que "necesitamos unidad para probar que Europa funciona", y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha asegurado que las diferencias entre los europeos son "mucho más fáciles de lo que se piensa" de superar.

A diferencia de sus homólogos europeos, Rajoy no ha atendido la prensa y ha evitado valorar las últimas noticias españolas, como el caso Rita Barberá, a pesar de ser preguntado por la prensa en su entrada a la reunión.