Aunque España intenta pasar página del conflicto diplomático con Marruecos, el reino alauí no parece tener ninguna intención de permitírselo. A las advertencias que hizo hace pocos días la embajadora de este país en España, Karima Benyaich, sobre que si el líder del Frente Polisario, Brahim Gali, salía del Estado sin ser juzgado, la crisis se agravaría, se suman ahora los reproches del ministro de Exteriores, Naser Bourita.

En una entrevista en la emisora francesa Europa1, Bourita no ha aflojado y ha acusado a España de "crear" la crisis abierta y de enfangar a Europa con esta decisión. "España no consultó a Europa antes de tomar decisiones que afectan a los intereses de Marruecos. España no consultó a Europa antes de incumplir los criterios Schengen para aceptar la entrada fraudulenta de una persona buscada por la justicia española. España ha creado una crisis y quiere ahora que lo asuma Europa", ha afirmado.

Bourita ha pedido de esta manera "contextualizar" la crisis entre Marruecos y España: "Hay un contexto de crisis bilateral entre Marruecos y España, una crisis qué no tiene que ver nada con Europa, una crisis que fue creada por una decisión nacional de España sin consultar a sus socios europeos".

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El ministro de Exteriores marroquí, Naser Bourita / Foto: Europa Press

Desmintiendo a España

Bourita también ha desmentido a la ministra de Exteriores española, Arancha González Laya, que aseguró que se mantienen muchas conversaciones de manera discreta con el reino alauí. Según el ministro marroquí, no ha habido contacto entre Marruecos y España desde el estallido de esta crisis.

"Hoy Marruecos hace preguntas claras: ¿es normal en un Estado de derecho ante un socio como Marruecos que se falsifique un pasaporte, usurpar una identidad para llevar a alguien en territorio europeo? ¿Es normal que este señor esté siendo procesado en España por cuatro denuncias de violación, terrorismo y torturas?", ha planteado Bourita.

En definitiva, para Bourita "hay un problema de confianza, de respeto mutuo con el socio directo en una crisis que la misma España ha creado, le toca a ella encontrar la solución". "Si España piensa que la crisis podría solucionarse sacando en secreto a este señor por los mismos procedimientos, es porque está buscando un deterioro y un agravamiento de la crisis, o incluso la ruptura", ha advertido.

Los equilibrios de España

Con todo este asunto y como se explicó en este diario el sábado, España no hace nada más que tratar de mantener los equilibrios en sus relaciones con dos socios estratégicos enfrentados entre ellos: Marruecos y Argelia, mientras también mantiene la misma postura en la cuestión del Sáhara Occidental que adoptó hace 30 años y que, por ahora, coincide con la de la ONU: hay que celebrar un referéndum en la región.

desfile militar sahara occidental frente polisario - STR / Dpa

El Frente Polisario celebra el aniversario de la República Saharaui / Foto: Europa Press

Quita hierro a la crisis migratoria

Hay que destacar también como Bourita se ha pronunciado sobre el hecho de que casi 10.000 personas entraran de manera precipitada e irregular en Ceuta. Para él, "hay un intento de desviar el debate, de centrarse en una cuestión migratoria mientras que el fondo de la crisis es un acto de injusticia de España hacia Marruecos, hacia su gente y hacia sus intereses estratégicos".

En este sentido ha pedido "alejarse de los discursos emotivos". La primera verdad es que Marruecos no está obligado, no tiene vocación u obligación de proteger fronteras que no sean las suyas. Marruecos no es ni el gendarme ni el conserje de Europa para proteger las fronteras que no son las suyas", ha dicho.

 

Imagen principal: Un menor migrante es alcanzado después de llegar a Ceuta / Foto: Efe