Los principales representantes institucionales de Kosovo han firmado este miércoles el documento oficial para pedir su ingreso en la Unión Europea (UE), el cual entregarán este mismo jueves a la presidencia de República Checa de la UE. Lo han hecho en Pristina en una ceremonia retransmitida en directo por diferentes medios kosovares y que pretende ser un nuevo paso para conseguir formar parte de esta comunidad política. El documento ha sido firmado por la presidenta kosovar, Vjosa Osmani, el presidente del Parlamento, Glauk Konjufca, y el primer ministro, Albin Kurti. "Hoy es un día histórico. Es un momento histórico", ha asegurado Vjosa Osmani, que también ha señalado que han dado "un paso decisivo para cumplir su sueño, para acercar un poco más el país a la UE". "Para Kosovo, no hay alternativa", ha añadido.

Por su parte, el primer ministro Kurti ha confirmado que presentarán la solicitud a la presidencia checa de la Unión Europea en Praga. "El progreso dependerá de nuestro compromiso con reformas profundas y progresistas. Lo rápido que vayamos dependerá de nosotros", ha apuntado al jefe del gobierno kosovar según ha recogido Efe. El presidente del Parlamento, Glauk Konjufca, también ha celebrado la formalidad del documento y ha pedido a los países miembros de la UE que den apoyo "con unanimidad" a este "primer paso oficial en el camino de adhesión de Kosovo". Siguiendo el reglamento establecido por la UE, una vez llegue la petición kosovar al Consejo, el país que ocupa la presidencia tiene que informar al resto de Estados miembros y en el Parlamento Europeo. A partir de aquí, los ministros de Exteriores tienen que evaluar la solicitud y decidir si se tiene que pedir el dictamen de Bruselas. Ante este largo procedimiento, la presidenta del Kosovo ha reconocido que la incorporación del país en la UE se trata de un objetivo "a largo plazo", según ha informado Kosova Press.

La situación de Kosovo

El trámite por la entrada de Kosovo a la UE no es precisamente sencillo. España, Chipre, Grecia, Eslovaquia y Rumania no reconocen su independencia, hecho que dificulta las perspectivas de adhesión. Hay que recordar que la exprovincia de serbia proclamó su independencia el año 2008, con el apoyo de los Estados Unidos y de la mayoría de sus socios comunitarios, pero no de Serbia, China, Rusia, India, Brasil, entre otros estados. "Está claro que no hay postura unánime en torno al estatus de Kosovo", aseguró el ministro serbio de Exteriores, Ivica Dacic, citado por el diario Politika. De hecho, Serbia ya anunció que intentará impugnar la demanda del Kosovo para adherirse a la UE. Sin ir más lejos, la firma de este documento llega en medio de tensiones entre Pristina y Belgrado, y con un bloqueo en las carretas del norte de Kosovo por parte de la población serbokosovar de la zona como muestra de protesta por lo que consideran una creciente discriminación por parte del gobierno del país.