Un incidente se ha producido en una rueda de prensa electoral de la candidata ultra Marine Le Pen, cuando una activista se ha alzado y ha mostrado un gran corazón con las imágenes de la política francesa y del presidente ruso, Vladímir Putin. Inmediatamente, el servicio de orden ha desalojado con malas maneras a la activista, arrastrándola por el suelo. "Sólo quería evidenciar que la diplomacia de Marine Le Pen ha estado complaciente con los dictadores", ha denunciado la activista después ante las cámaras. El incidente se ha producido pocas semanas después de que el equipo de la candidata al Elíseo tuviera que destruir más de un millón de folletos electorales de su campaña, porque aparecía una fotografía con el presidente ruso.

 

Curiosamente durante la rueda de prensa Le Pen ha defendido unos vínculos más estrechos entre la OTAN y Rusia, y ha añadido que si gana la presidencia francesa, París dejaría el mando militar de la alianza liderada por EE.UU. "Tiene que haber un acercamiento estratégico entre la OTAN y Rusia una vez haya acabado la guerra lanzada por Moscú contra Ucrania", ha indicado. Hace cinco años, antes de enfrentarse a Macron en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de 2017, Putin recibió a Le Pen en el Kremlin con los brazos abiertos para darle apoyo. Entonces la candidata declaró con admiración que compartía los mismos valores que Putin y que estaba surgiendo un "nuevo orden mundial", con el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y ella al frente. En aquella época también se retrató con la bandera de la armada rusa, según se comenta, en Crimea.

También se han registrado incidentes en un mitin del presidente Emmanuel Macron en Estrasburgo. El acto electoral ha sido interrumpido por protestas de varios colectivos molestos con el gobierno francés, desde chalecos amarillos a antivacunas, pasando por manifestantes de Francia Insumisa (el partido de Jean Luc Mélenchon) que reclamaban mantener el impuesto ICS a los beneficios. Estos últimos han interrumpido el parlamento de Macron con camisetas con el texto "Poned impuestos a los ricos", y han sido desalojados por el servicio de orden. Sobre el papel, Macron necesita ahora los votos de Mélenchon para imponerse la próxima semana a Marine Le Pen, y si un porcentaje significativo de la izquierda se abstiene puede provocar la victoria de la extrema derecha.