A causa de la falta de combustible y suministros médicos y los ataques de Israel contra hospitales, el sistema de salud de la Franja de Gaza prácticamente ha colapsado. Y a medida que los hospitales del norte de Gaza y a la ciudad de Gaza quedaron fuera de servicio, la carga sobre los pocos hospitales funcionales en las partes centrales y sur del enclave ha aumentado.

Ahmed Isleem ha perdido a la mujer y la hija en Khan Younis, junto con 10 vecinos y familiares más. A él lo sacaron de bajo los escombros y todavía no sabe cómo es que está vivo. Isleem sufrió muchas heridas de metralla a diferentes artes del cuerpo, le hicieron una cirugía en su sistema digestivo y otra operación para insertar platino en el pie después de que se rompiera. "No hay seguridad, ni tratamiento, nada," destaca y recoge Al Jazeera. "No puedo soportar mi dolor y también los gritos de los otros heridos que me rodean".

El Hospital Europeo de Gaza recibe cada día decenas de palestinos muertos y heridos, algunos de ellos, provenientes de otros hospitales saturados. También es un lugar de refugio para personas desplazadas, a pesar de la falta de provisiones. El mismo portal recoge al testimonio de Khawla Abu Daqqa, de 40 años y también de Khan Younis. Destaca que no tienen donde ir, que encontrar refugio es complicado y también lo es encontrar comida. Su único deseo es que la guerra acabe para todos.

Falta de medicamentos, colapso y fatiga

Aparte de la falta de suministros y el colapso, el director del Hospital Europeo de Gaza, Youssef al-Aqqad, ha dicho a Al Jazeera que las personas desplazadas de todo el territorio vienen aquí y tienen que encontrar espacio en el hospital. Según explica, está muy lleno: habitaciones, puertas de las habitaciones, pasillos, escaleras y jardín del hospital. Así, destaca que estas personas necesitan servicios, incluyendo alimentos, agua y electricidad. "Nos sentimos preocupados por el ataque del ejército israelí a los hospitales". Al hospital llegan cada día personas heridas de Rafah y también de Khan Younis. Precisamente por eso, ha llegado ya al límite de sus capacidades.

Como resultado, destaca que el número de infecciones va en aumento. Así, destaca que la situación es muy complicada porque las escuelas tampoco están equipadas y ahora se están utilizando para dar respuesta a los heridos más leves, porque los hospitales no pueden con todo. Además de no tener recursos, el personal médico también está fatigado y cansado porque han trabajado de manera ininterrumpida. Los voluntarios que ayudan no tienen ningún tipo de experiencia en el campo la salud. Precisamente por este motivo, constata que se necesitan médicos especializados que trabajen en salas de cuidados intensivos.

Se calcula que 26 de los 35 hospitales de la Franja de Gaza no funcionan a consecuencia de la falta de combustible y los ataques del ejército de Israel. El hospital indonesio ha sido bombardeado repetidamente por el ejército de Israel, que también ha ordenado la evacuación de médicos y heridos. Eso habría obligado en el Ministerio de Salud de Gaza a distribuir por los hospitales que seguían funcionando en el centro y en el sur de la franja.

Al Jazeera destaca también que el Hospital de los Mártires de Al-Aqsa también está saturado, especialmente después de los ataques israelíes en campos de refugiados a la zona central de la Franja de Gaza, incluyendo Deir el-Balah, Nuseirat y Bureij.