El centro de Bruselas se ha convertido este domingo en el epicentro de una serie de disturbios después de la victoria del Marruecos ante Bélgica en el Mundial de Qatar 2022. Un centenar de personas se han lanzado a la calle para celebrar la victoria de Marruecos en la zona peatonal próxima al Palais du Midi, algunos de ellos con banderas de Marruecos a la espalda y otros con la cara tapada. Lo que tenía que ser una celebración se ha acabado convirtiendo en unos grandes disturbios, donde los participantes han quemado coches, han destruido el mobiliario urbano y han lanzado proyectiles contra la policía.

Según relatan algunos medios belgas, la situación ya era tensa antes del inicio del partido, pero las tensiones entre los seguidores de ambas selecciones han estallado con la derrota de Bélgica ante Marruecos, por 0-2. Varios coches y patinetes han sufrido daños, incluso se han quemado algunos vehículos que estaban en la calle. La zona policial de Brussel·les-Capital/Ixelles ha pedido, a través de Twitter, a los ciudadanos de la capital belga que eviten el sector del Boulevard du Midi y las calles adyacentes.

Los incidentes han empezado a mitad del segundo tiempo, cuando unos 150 jóvenes reunidos en el centro de la capital belga han calado fuego a un contenedor y han lanzado petardos y fuegos artificiales, después han empezado a emprender a veces con los vehículos estacionados en la zona, según ha informado la televisión pública belga RTBF.

Enfrentamiento con la policía

Los agitadores que estaban en el boulevard Lemonnier han lanzado piedras contra la policía. Después de unos minutos de enfrentamientos, la policía ha decidido cerrar esta vía al tráfico en ambos sentidos. También se han visto obligados a cerrar diversas estaciones de metro.

La policía belga ha informado a través de un comunicado de que ha habido uso de material pirotécnico, lanzamiento de proyectiles, uso de palos, fuego en la vía pública, en particular de un contenedor a la intersección del Boulevard Lemonnier y la rue de Woeringen. Además, también han confirmado que un periodista ha resultado herido en la cara por los fuegos artificiales. "Es por estos motivos que se decidió proceder a una intervención policial, con el despliegue del aspersor y el uso de gases lacrimógenos", ha explicado la portavoz local, Ilse Van de Keereel.

Los disturbios este domingo se circunscriben a al centro de la ciudad, mientras que en otras partes de Bruselas, dónde vive una importante comunidad marroquí, la celebración se produce de momento sin incidentes. 

El alcalde de Bruselas, Philippe Close, a través de Twitter, ha denunciado con la máxima firmeza los incidentes de este domingo. "Por lo tanto, aconsejo a los seguidores que no vengan al centro de la ciudad. La policía está utilizando todos sus medios para mantener el orden público", ha escrito. Además, ha indicado que la policía ha recibido la orden de hacer detenciones administrativas.