Aprovechar el triunfo y activación del Brexit para replantearse toda la política europea de los fondos de cohesión. Eso es lo que tiene previsto llevar a cabo Alemania, según publica Der Spiegel, que explica que la intención del cambio sería castigar a los países que no se rigen por los principios básicos de la Unión Europea con la retirada de los fondos.

Por lo visto, esta iniciativa estaría dirigida principalmente a Polonia y Hungría por su postura con los refugiados, aunque las últimas medidas impuestas a estos dos países por la UE no han prosperado ya que siguen vetándoles la entrada y violando los valores fundamentales de la UE.

Todas las medidas que el gobierno de Angela Merkel tomaría vienen escritas en un documento titulado "La declaración del Gobierno Federal por la política de cohesión de la UE después del 2020" y hace referencia al reparto de ingresos de cara a los próximos presupuestos entre los países más ricos y más pobres de la UE.

Castigar a España

La intención de tomar estas medidas es evitar que la UE entre en deuda, teniendo presente que la partida del Reino Unido dejará la UE con 13.000 millones de euros menos al año. Precisamente por eso, sólo se puede escoger hacerlo ahorrando -es decir, recortando gastos de algún lado- o bien consiguiendo más dinero de otros colaboradores.

Los países del este de Europa son los que principalmente reciben estos fondos. España es el sexto país que recibe más y quizás podría perderlos si no siguiera los valores europeos establecidos. Por ejemplo, si se acaba demostrando que los Centros de Internamiento de Extrangeros (CIE) no respetan los derechos fundamentales de los internos.

La Comisión Europea se ha comprometido hoy con ERC a castigar a España si, finalmente, se constatan las vulneraciones de los derechos básicos de los internos en los CIE.