El Parlamento Europeo ha dado este miércoles la luz verde definitiva a los 10 textos legislativos que forman el Pacto Migratorio y de Asilo, que regula las acciones desde la llegada del migrante hasta su acogida o rechazo de la solicitud de asilo. De esta manera, los eurodiputados han ratificado el acuerdo político alcanzado a finales de diciembre con el Consejo de la UE, el otro colegislador, para actualizar unas normas que refuerzan las fronteras exteriores del club comunitario, endurecen la acogida y el control sobre los migrantes y crean un sistema de solidaridad voluntaria en el reparto de migrantes y para asistir a países de primera llegada, como Italia, Grecia y España, según informa la ACN.

Las nuevas reglas en materia de migración y asilo han sido criticadas por organizaciones que consideran que vulneran el derecho al asilo. Precisamente, este miércoles la votación al pleno del Parlamento Europeo ha sido marcada al inicio por una protesta de manifestantes que pedían a los eurodiputados votar no al Pacto Migratorio y de Asilo. En línea con lo que han apuntado algunas organizaciones, los manifestantes han criticado que el pacto "mata". El año pasado, 6.618 personas murieron intentando llegar a las costas españolas, lo que representa una media de 18 al día. La cifra casi triplica los registros de 2022, y evidencia la dificultad que encuentran los migrantes para encontrar rutas seguras para entrar en el continente europeo.

Las normas buscan reducir las entradas irregulares a la UE, descongestionar los procedimientos para pedir asilo y repartir las responsabilidades entre los estados miembros. Después de que el Parlamento Europeo renunciara a las cuotas obligatorias de acogida de migrantes para llegar a un acuerdo con el Consejo en diciembre, las nuevas normas fijan un mecanismo voluntario de reparto de migrantes con el objetivo de redistribuir al menos 30.000 el año. En caso de que un país rechace hacerlo, tendrá que pagar una penalización de 20.000 euros por migrante rechazado o dar al país en cuestión apoyo de alguna otra manera.

Un procedimiento acelerado de asilo en la frontera

El Pacto también incluye un procedimiento acelerado de asilo en la frontera con el fin de resolver más rápidamente los casos con pocas posibilidades de conseguir protección. Las nuevas normas prevén un control y registro de los migrantes que llegan a las fronteras comunitarias con el objetivo de identificarlos rápidamente y que estos ya no lleguen al procedimiento de asilo en caso de que se considere que las razones alegadas para conseguir protección son infundadas.

Aparte de la identificación, también se harán pruebas sanitarias y de seguridad en los migrantes, así como impresiones dactilares y se registrarán en el Eurodac, la base de datos de la UE donde se recogen las huellas digitales para identificar migrantes irregulares o solicitantes de asilo. La reforma migratoria comunitaria también apuesta por impulsar acuerdos con terceros países a fin de que impidan la llegada de migrantes a la UE. Se sigue así el ejemplo de acuerdos como el de Turquía y Túnez, un hecho que puede impulsar la instrumentalización de migrantes por parte de estos países.