El grupo terrorista Estado Islámico ha reivindicado hoy el asesinato de un comandante de policía y su mujer en Magnanville, a 50 kilometros del noroeste de París, y el ministro del Interior francés lo ha confirmado. Según ha informado la agencia afín a EI Amaq, un "combatiente" suyo "ha muerto con arma blanca al jefe adjunto de la policía" de la comisaría de Mureaux y a su mujer, también funcionaria de policía".

El agresor, abatido por la policía, sería un joven de nacionalidad francesa de 25 años y que ya estaba fichado por radicalización y por robo con violencia. Después de asesinar al comandante de nueve navajazos en el abdomen, el asesino se ha encerrado en su casa tomando como rehenes a su mujer y su hijo de tres años, que ha sido liberado.

El presidente francés, François Hollande, ha convocado una reunión de urgencia esta mañana al Elíseo y, en un comunicado, ha condenado "con fuerza este acto odioso" y "asesinado cobarde". También el primer ministro, Manuel Valls, y el ministro de Interior, Bernard Cazeneuve, han expresado su "solidaridad con la policía" e "infinita tristeza" y han querido "rechazar el miedo y combatir el terrorismo".

El asesino apuñaló al comandante de policía, jefe adjunto de la policía judicial en la comisaría de Mureux, a las ocho y media de la noche de este lunes, cuando volvía a su casa del trabajo, vestido de calle. Después se atrincheró en su domicilio, tomando como rehenes a la mujer, que también era funcionaria de policía, y trabajaba como secretaria en la comisaría de Magnanville, y a su hijo de tres años. Durante la negociación con los cuerpos de policía del RAID y el BRI, el mismo agresor se identificó como miembro de Estado Islámico. 

"El agresor ha sido neutralizado por las fuerzas de intervención de la policía, que han demostrado tener mucha sangre fría y una gran profesionalidad que ha permitido salvar la vida del pequeño", ha celebrado Cazeneuve. Los agentes han abatido al asesino durante el asalto y han rescatado sano y salvo al niño de tres años, en estado de choque y atendido por los servicios médicos, pero no han podido salvar a la mujer, que ha muerto degollada.

El agresor estaba domiciliado en Mantes-la-Jolie, precisamente ciudad donde había trabajado el comandante de policía. Francia continúa en estado de emergencia, siete meses después de los atentados del Bataclan, las terrazas de los distritos Xéme y el estadio de Sant Denís. En plena celebración de la Eurocopa, y con 90.000 policías y gendarmes movilizados, hoy está prevista una gran manifestación contra la reforma laboral en París.

Condenado en 2013

Larossi Abballa, identificado como el hombre que ha matado a puñaladas a dos policías en Magnanville, al oeste de París, fue condenado en 2013 por su participación en una filial yihadista encargada de promover el reclutamiento de milicianos, según informó la prensa gala.

La cadena de televisión BFM explicó que Abballa había radicalizado en los últimos años y que fue condenado en 2013 por su implicación en una filial yihadista encargada de promover el reclutamiento de milicianos en Francia, su formación física y psicológica y la envío de jóvenes voluntarios en Pakistán.

Abballa fue condenado a una pena de tres años de prisión, de los cuales seis meses fueron suspendidos, y se le concedió la libertad condicional a los dos años. Fue juzgado junto con otros siete acusados