Egipto, principal mediador en el último intento para un alto el fuego en Gaza, ha asegurado este miércoles que continúa sus esfuerzos "entre todas las partes" por conseguir un cese el fuego entre Israel y Hamás, y ha subrayado que los contactos se desarrollan en un "ambiente positivo". "Egipto continúa sus esfuerzos para una tregua en medio de un ambiente positivo", han dicho fuentes egipcias "de alto rango", según el canal de televisión egipcia En el QaheraNews, próximo a los servicios de Inteligencia del país norteafricano. Eso llega después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, avisara de que Israel entraría a Rafah "con acuerdo, o sin", durante una reunión con familiares de secuestrados y víctimas del ataque del 7 de octubre.

Desde el gobierno egipcio subrayan que mantienen "contactos con todas las partes interesadas para solucionar algunos puntos controvertidos" entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás. Estas afirmaciones llegan mientras las autoridades egipcias esperan que Hamás les comunique su respuesta definitiva a la última propuesta para una tregua que permita el intercambio de presos palestinos por rehenes y el aumento de la ayuda a los ciudadanos de Gaza. Un equipo de negociadores de Hamás mantuvo el lunes "conversaciones ampliadas" en el Cairo, donde se les explicó la nueva propuesta, y fuentes egipcias afirmaron que la delegación del grupo palestino "abandonó" la capital egipcia, pero volverá con una respuesta por escrito.

Crecientes esfuerzos diplomáticos

Esta propuesta había sido negociada por altos responsables de seguridad egipcios en Israel, en el contexto de crecientes esfuerzos diplomáticos y presiones para conseguir una pausa con las cuales evitar también una eventual operación militar israelí en Rafah, en el extremo sur de Gaza y donde amontonan más de 1,5 personas. Esta sería la segunda tregua entre Hamás e Israel desde el inicio de la guerra en Gaza, desencadenada por el ataque masivo del grupo islamista palestino en Israel, el 7 de octubre pasado, y la posterior guerra abierta declarada por el Estado judío en el enclave palestino, donde murieron más de 34.000 personas.

La primera y única pausa fue acordada a finales noviembre pasado y duró siete días, en los cuales fueron liberados 105 rehenes tomados por Hamás a cambio de 240 presos palestinos. Se cree que otras 133 secuestrados por Hamás y otras formaciones palestinas todavía siguen en Gaza, algunos de ellos muertos.