Nueva polémica con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como protagonista. Con el cónclave para escoger al sucesor del papa Francisco en el horizonte, el magnate ha publicado una imagen de él mismo vestido de papa hecha con inteligencia artificial (IA). En la fotografía compartida en sus redes sociales, Trump aparece vestido con sotana blanca, mitra, cree dorada y parece estar a punto de dar una bendición, ya que tiene el brazo derecho inclinado a la altura del hombro y con el dedo índice levantado. Trump, que asistió el pasado sábado al funeral del papa Francisco en Roma, hace días que asegura que el mejor nuevo santo padre sería él mismo y así lo ha compartido en las redes. El presidente estadounidense afirmó este miércoles desde la Casa Blanca su intención: "Me gustaría ser papa. Esta sería mi opción número uno. Creo que sería un gran papa. Nadie lo haría mejor que yo". Con esta imagen, Trump vuelve a situarse en el centro de la polémica, ya que en el funeral del papa Francisco en el Vaticano, se saltó el protocolo al asistir con un traje azul y no negro, como marca la tradición en estos casos.
La apuesta de Trump como próximo papa
Donald Trump ha afirmado que no tiene un cardenal preferido para suceder el papa Francisco, pero ha considerado que "hay un cardenal de un lugar denominado Nueva York que es muy bueno. Veremos qué pasa". Trump hacía referencia al cardenal Dolan, que es arzobispo de Nueva York y será uno de los prelados estadounidenses que estará presente en el cónclave, que arranca el miércoles 7 de mayo en la Capilla Sixtina. En concreto, Estados Unidos tendrán diez cardenales representados en el cónclave y Dolan ya estuvo presente en el celebrado en 2013, en el cual fue escogido como nuevo papa el cardenal argentino Jorge Bergoglio.
Otros de los cardenales estadounidenses mencionados como favoritos son Raymond Burke, considerado uno de los favoritos en el ámbito más conservador, y Robert Prevost, nombrado por Francisco prefecto del Dicasterio de los obispos y presidente de la Comisión Pontificia para Latinoamérica y un fluido hispanohablante.
Cuenta atrás para el cónclave
El cónclave para elegir al nuevo representante de la Iglesia católica arrancará el próximo miércoles en el Vaticano. Precisamente, este viernes los bomberos ya instalaron la chimenea al techo de la Capilla Sixtina, de la cual saldrá el humo negro o blanco que anunciará si hay acuerdo entre los cardenales. Se prevé que ya incluso este fin de semana se hagan algunas pruebas para comprobar que la chimenea funciona. La Capella Sixtina del Vaticà ya cerró al público este lunes para los preparativos del cónclave, en el cual los 133 cardenales, con menos de 80 años, ante el imponente Juicio Universal de Miguel Ángel, votarán a sus candidatos para suceder a Francisco.
Los cardenales que participarán en el cónclave la próxima semana se alojarán en la residencia de Casa Santa Marta —dónde vivía el papa Francisco—, un hotel moderno, de cinco plantas, preparado para dar comodidad a los purpurados, pero también el total aislamiento. La "Domus Sanctae Marthae", nombre oficial de la ya conocida residencia de Francisco, se levanta a pocos metros, a la derecha, de la basílica de San Pedro, tiene 105 confortables suites de dos estancias y 26 habitaciones individuales, varios salones, un comedor y una amplia capilla, que sirvió de capilla ardiente después de la defunción del papa Francisco, el pasado 21 de abril.