La policía alemana ha detenido este domingo a medio centenar de neonazis, sospechosos de dirigirse a la frontera con Polonia para atacar a personas migradas. Según el rotativo alemán Der Spiegel, la motivación de los detenidos ha sido fácil de determinar, ya que iban armados con bates de béisbol, porras, machetes, bayonetas y esprays lacrimógenos. Parece que los detenidos forman parte del partido político de extrema derecha denominado el III camino, que había incitado a los militantes a "pasar a la acción" contra los inmigrantes que atraviesan fronteras.

Neonazis

Los cincuenta neonazis, divididos en grupos, han sido descubiertos por las autoridades alemanas en el Estado de Brandeburgo mientras se dirigían a Guben, en la frontera con Polonia. Según el diario alemán, los detenidos habrían viajado desde toda Alemania para responder al llamamiento del partido neonazi, que esta misma semana los animó a "tomar acción" y plantar cara a la inmigración. Por lo que ha explicado la policía, muchos de los ultras llevaban armas blancas en el momento de la detención, hecho que ha hecho saltar las alarmas. La policía continuará vigilado la zona en los próximos días con el fin de intentar parar a más militantes ultras.

Después de que Bielorrusia haya decidido abrir las fronteras con el fin de presionar la Unión Europea, los países por los cuales transitan las rutas migratorias han vivido un resurgimiento del extremismo y el racismo. Con el fin de contrarrestar este sentimiento neonazi y el llamamiento del III camino, un grupo de unos 120 antifascistas se han concentrado durante 24 horas ante de la frontera con Polonia para custodiarla: "No queremos dejar la región en manos de los neonazis. Queremos dar ejemplo que el asilo es y seguirá siendo un derecho humano", han reivindicado los organizadores.

Bielorrusia

Polonia ha detectado que el pasado mes de agosto hubo más de 3.059 intentos de infiltración ilegal a través de la frontera bielorrusa. De momento, el país ya ha acusado a Minsk de orquestar una "guerra híbrida" al provocar una oleada de migración irregular. De esta manera, Polonia ha dicho que construirá una valla en la frontera con Bielorrusia para frenar la afluencia de migrantes. Otros estados de la Unión Europea, Lituania y Letonia, también han experimentado un fuerte aumento de migrantes procedentes del Oriente Medio y Asia.

El presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukaixenko, respondió así a las nuevas sanciones de la Unión Europa: abriendo la puerta a la migración y el contrabando masivos. "Ya dije francamente que no contendremos a aquellos que habéis oprimido en Afganistán, el Iraq e Irán. No tenemos dinero ni fuerzas para ellos por culpa de vuestras sanciones", subrayó Lukaixenko, añadiendo que "Nosotros éramos un tapón para la droga y los migrantes, ahora se tendrán que ocupar ellos".

 

Foto principal: una agente de la policía alemana / Efe