Durante meses, centenares de cubanos han abandonado silenciosamente la isla para luchar por Rusia a su guerra en Ucrania, persiguiendo promesas de dinero y ciudadanía rusa de varios reclutadores a través de varios canales online, según habrían dicho familiares a la CNN.

En gran parte de Cuba, la economía se ha paralizado mientras la isla sufre una fuerte caída del turismo y un aumento de la inflación y renovadas sanciones provenientes de los Estados Unidos. La cadena norteamericana destaca que lugares como Santa Clara, una ciudad de cerca de 250.000 habitantes con frecuentes apagadas diarias de varias horas de duración hay más caballos que coches y que, supuestamente, había un número ilimitado de hombres descontentos para reclutar.

Las consecuencias del reclutamiento

Este intento en la desesperada de reclutar soldados en Cuba ha amenazado con hacer retroceder las relaciones de Rusia con su antiguo aliado de la guerra fría. Desde que empezó la guerra, los funcionarios cubanos se habían hecho eco de la propaganda rusa que la agresión de la OTAN era la culpable de su invasión de Ucrania. Rusia, al mismo tiempo, envió más petróleo a la isla y prometió una mayor inversión extranjera.

A pesar de todo, los funcionarios cubanos parecían haber demostrado contundentemente que se negaban a involucrarse directamente en la guerra al permitir que sus ciudadanos sirvieran al ejército ruso con la aprobación explicita del Estado cubano. Los mensajes confusos rápidamente dejaron desconcertados incluso a los observadores experimentos de Cuba.

El embajador de Cuba en Moscú fue citado por medios de comunicación rusos diciendo que Cuba no se opone a la "participación legal de sus ciudadanos en la operación especial rusa en Ucrania, siempre que no hayan sido reclutados por terceros".

Disputa interna en Cuba

"No tenemos nada en contra que los cubanos quieran firmar un contrato y participar legalmente en esta operación con el ejército ruso, pero nos oponemos a la ilegalidad y estas operaciones no están dentro de un marco legal", ha dicho el embajador de Cuba a Rusia, Garmendía Peña. Las declaraciones se refieren directamente a los esfuerzos por reclutar personal en línea, según la agencia estatal de noticias RÍA Novosti.

El ministro de Exteriores cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, emitió un comunicado diciendo que a los ciudadanos cubanos bajo ninguna circunstancia se les permite luchar al extranjero. Los funcionarios cubanos estaban furiosos porque los comentarios del embajador eran una distracción molesta, justo cuando los diplomáticos cubanos mantenían una reunión con sus homólogos de los Estados Unidos. Todo, pasaba el día antes de que La Habana fuera la sede de la cumbre de las naciones en desarrollo del G77+China.