El Reino Unido ha alcanzado este martes los 37.048 muertos por coronavirus en residencias, hogares y domicilios, tras sumar 134 fallecidos, y ha detectado 2.004 nuevos casos de coronavirus, según el Ministerio de Salud británico.

Pese a estos nuevos datos, el Gobierno de Boris Johnson mantiene el plan de reabrir escuelas y mercados al aire libre en Inglaterra a partir del lunes, y permitir la apertura del resto de comercios no esenciales desde el 15 de junio.

Además, el Ejecutivo conservador continúa bajo una intensa presión política tras haberse revelado en los últimos días que el principal asesor de Johnson, Dominic Cummings, se saltó las normas del confinamiento.

Los líderes de los partidos minoritarios de la oposición han enviado una carta conjunta al jefe de Gobierno urgiendo a que destituya a Cummings, ideólogo de la campaña a favor del Brexit previa al referéndum de 2016. "No puede haber una regla para aquellas personas involucradas en el diseño de las políticas de salud y otra para el resto de nosotros", indica la misiva.

El asesor ha reconocido que condujo más de 400 kilómetros desde Londres al norte de Inglaterra para permanecer en una propiedad adyacente a la de sus padres cuando su mujer había desarrollado síntomas de COVID-19.

También ha admitido que visitó durante el confinamiento la localidad turística de Barnard Castle, a 50 kilómetros de la casa de sus padres, para "comprobar" que su vista no estaban dañada tras superar él mismo la enfermedad y asegurarse de que estaba listo para volver a conducir.