El verano no le está sentando bien a Donald Trump. El candidato republicano cada vez es más cuestionado y más criticado, y su salud mental está en pleno orden del día. Las críticas le llegan por todos los lados, evidentemente desde las filas demócratas, pero también desde las republicanas.

Una senadora republicana ha publicado un artículo en varios medios donde asegura que no votará por el magnate. No es la única. Hasta 50 exaltos cargos republicanos han publicado hoy también una carta en la que expresan su oposición a la candidatura del magnate porque lo consideran "un peligro". De hecho, aseguran que Trump "no está calificado para ser comandante en jefe" y que sería "un presidente peligroso que pondría la seguridad y el bienestar en peligro".

Ignorante e incompetente

Los firmantes se cuestionan la falta de "carácter, valores y experiencia" del magnate, así como la falta de conocimientos básicos que tiene para gobernar un país, y consideran que sería el presidente "más irresponsable de la historia norteamericana".

Entre los firmantes se encuentran John Negroponte, director Nacional de Inteligencia con George W. Bush; Robert Zoellick, exdirector del Banco Mundial y subsecretario de Estado con Bush; o Michael Hyden, director de la CIA también durante el mandato del antecesor del actual presidente de los Estados Unidos, Barack Obama.

De hecho, la carta llega poco después de que un exagente de la CIA, Evan McMullin, haya anunciado que quiere liderar una candidatura alternativa a Trump. McMullin quiere atraer a los conservadores descontentos con Trump.

Clinton, en auge

Los demócratas han encontrado la estrategia para contrarrestar Trump y catapultar a su candidata, Hillary Clinton, a conquistar la Casa Blanca. En un momento en que Trump está en horas bajas tanto por las críticas como por los malos resultados de las encuestas, los demócratas apuestan por jugar fuerte la carta de las dudas sobre la salud mental del candidato.

Lo cuestionó el mismo Barack Obama, cuando la semana pasada lo consideró "no apto" para gobernar el país y pidió a los republicanos que le retiraran el apoyo. También lo hizo la congresista demócrata, Karen Bass, que ha iniciado una petición por Change.org para pedir que Trump se someta a un examen mental.

Según Bass, Trump sufre un trastorno de la personalidad narcisista y es peligroso para el país por su impulsividad y falta de control. La campaña ya cuenta con casi 30.000 firmas.