El caso Epstein se está enquistando y se convierte en una bola cada vez más grande que amenaza con abrir una brecha en el movimiento Make America Great Again (MAGA) de los seguidores del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Amplios grupos de las bases trumpistas exigen al Gobierno americano que haga público el expediente con todos los documentos relativos al ya fallecido magnate Jeffrey Epstein, detenido por abuso sexual y tráfico de decenas de menores a principios de los años 2000, siendo uno de los mayores escándalos de explotación sexual de las últimas décadas. Trump, quien fue amigo de Epstein, se comprometió en campaña a desclasificar toda la información sobre el caso, por lo que las recientes explicaciones del Departamento de Justicia diciendo que no hay nada relevante no han satisfecho a las bases trumpistas. Los seguidores de Trump insisten ante la negativa del mandatario republicano, que les ha llegado a tildar de "idiotas", les ha pedido que dejen ya el tema y ha afirmado que todo es un "bulo".
La realidad es que, incluso aunque fuera cierto que no hay nada, difícilmente Trump podrá convencer a sus seguidores, a los que ha cultivado durante años en la conspiranoia contra hombres de paja. El caso Epstein es todo un sueño para esa mentalidad: el magnate estadounidense Jeffrey Epstein, dedicado a las finanzas y habitual figura de la prensa, fue detenido en julio de 2019 acusado de abuso sexual y tráfico de decenas de menores a principios de los años 2000, siendo uno de los mayores escándalos de explotación sexual de las últimas décadas. Estando en prisión, apareció muerto, ahorcado en su celda. Epstein tenía una isla privada en las Islas Vírgenes en la que celebraba fiestas a las que habrían ido figuras reconocidas de Estados Unidos. Todos quienes habrían tenido relación con el empresario aparecen en la llamada lista Epstein, los archivos de la investigación de sus delitos. Los seguidores trumpistas y grupúsculos derechistas en las redes han azuzado durante años la teoría de que esta lista la componen élites progresistas del Partido Demócrata, de Wall Street o de Hollywood y que todo ha sido encubierto por Barack Obama y Joe Biden.
El Departamento de Justicia sostiene que no hay nada
Este julio el caso Epstein volvió a primera plana porque el Departamento de Justicia, a cargo de la fiscal general Pam Bondi, publicó un memorando en el que señalaba que tras revisar los documentos el caso Epstein "no se ha revelado ninguna lista de clientes incriminatoria" ni ninguna prueba de que el magnate chantajeara a personalidades poderosas con las cosas que habría grabado en su isla. También se afirma que Epstein se suicidó en su celda, contradiciendo las prolíficas teorías de que su muerte en prisión mientras esperaba al juicio no fue un suicidio.
Las bases trumpistas exigen desclasificar toda la información del caso Epstein
Tras esta información, las bases MAGA estallaron y acusaron a la Administración Trump de encubrimiento y pidieron la dimisión de Pam Bondi. Los cuervos picando los ojos de su criador. Quien también acusó a Trump de encubrimiento fue el magnate Elon Musk, el hombre más rico del mundo y empleado especial de la Casa Blanca hasta hace unos meses, cuando rompió con el líder republicano. Cuando dejó el cargo, Musk afirmó en un tuit que Trump aparece en los archivos de Epstein y que ese es el motivo por el que todavía no se ha desclasificado la información. Poco después, Musk borró el tuit, ante las amenazas de Trump de romper los contratos que tiene con la administración pública. Por su parte, Mike Johnson, fiel trumpista que presidente el Congreso, ha reiterado la petición de más información sobre el caso: "Es un tema delicado, pero deberíamos publicar todo lo que haya y que la gente decida".
Trump ha respondido a la insistencia de los suyos y, expresando su apoyo a la fiscal Pam Bondi, ha pedido a sus seguidores a través de una publicación en su red social que dejen ya el tema Epstein, que ha tildado de "bulo". Trump ha aseverado que es una "nueva estafa" del Partido Demócrata para implicarlo como amigo de Epstein. "Han picado con esa gilipollez. No han aprendido la lección, y probablemente nunca la aprenderán, después ocho años de engaños de la izquierda lunática", ha lanzado Trump. También ha pedido que celebre el "éxito" de sus seis primeros meses de mandato y no le "hagan el trabajo" a los demócratas.