El presidente estadounidense, Joe Biden, ha convencido al resto de líderes del G7, reunidos en una cumbre en Carbis Bay (Reino Unido), para lanzar un gran plan de infraestructuras que contrarreste el avance de China. Así, los dirigentes del G7 han acordado este sábado lanzar la iniciativa Build back better for the world (reconstruir mejor para el mundo) para "responder a las necesidades tremendas de infraestructuras en los países de ingresos medios y bajos", ha informado la Casa Blanca. El plan irá dirigido a naciones de Latinoamérica, el Caribe, África y el Indopacífico.

El plan quiere ser una alternativa al proyecto chino One Belt, One Road (una ruta, un cinturón), que pretende revitalizar la conocida como Ruta de la Seda mediante la modernización de infraestructuras y telecomunicaciones para mejorar la conectividad entre Asia y Europa.

Respuesta al impacto de la Covid-19

El plan tiene como objetivo "ayudar a estrechar las necesidades de más de 40 billones de dólares en infraestructuras que necesita el mundo en desarrollo, y que se ha visto exacerbada por la pandemia de la Covid-19", dijo la Casa Blanca. La propuesta estadounidense pretende movilizar capital del sector privado para impulsar proyectos en cuatro ámbitos: el clima, la seguridad sanitaria, la tecnología digital y la igualdad de género, además de contar con inversiones de instituciones financieras.

Biden está poniendo el foco sobre China, que compite por la hegemonía mundial frente a EE. UU., durante esta cumbre de los líderes de las democracias más industrializadas del mundo (EE. UU., el Reino Unido, Alemania, Francia, Italia, Canadá, Japón, más la Unión Europea).

Joe Biden, Emmanuele Macron y Úrsula von der Leyen cumbre G7 junio 2021 EfeJoe Biden conversa com Macron y Von der leyen al inicio de la cumbre del G7 / Efe

Johnson y los acuerdos del Brexit

En paralelo, los líderes de los mayores países de la UE y las autoridades comunitarias han hecho este sábado frente común en sus reuniones con el primer ministro británico, Boris Johnson, para recordarle que el Reino Unido debe cumplir los acuerdos que suscribió al salir de la UE. Johnson mantuvo entrevistas bilaterales con el francés Emmanuel Macron, la alemana Angela Merkel y los presidentes de la Comisión, Ursula von der Leyen, y el Consejo Europeo, Charles Michel, antes de reanudar las sesiones plenarias de la cumbre del G7 en Cornualles (suroeste de Inglaterra).

La cuestión del protocolo sobre Irlanda del Norte, elemento nuclear del Acuerdo del Brexit que rubricaron Reino Unido y la UE, centró las conversaciones, como reconocieron posteriormente las partes implicadas, sin que hayan trascendido avances por el momento. Las autoridades comunitarias fueron contundentes al salir de su entrevista con Johnson: "Ambas partes deben implementar lo que se acordó. Hay unidad completa en la UE sobre esto", destacaron en Twitter Von der Leyen y Michel.

Los dos máximos representantes de la UE recordaron que el Acuerdo de Viernes Santo, de 1998, y la paz en Irlanda son "capitales" y que el protocolo suscrito por Londres "preserva" esos avances. "Queremos las mejores relaciones posibles con el Reino Unido", subrayaron los máximos responsables de la administración comunitaria. Por su parte, Boris Johnson trasladó a sus interlocutores que espera "pragmatismo y concesiones" por parte de todos al tiempo que se protege la paz en Irlanda del Norte.
 

Imagen principal, Joe Biden y Boris Johnson bromean durante la sesión fotográfica de la apertura de la cumbre del G7 / Efe