Los dos últimos estados que quedaban para decidirse ya han caído. Georgia y Carolina del Norte ya han acabado de contar los votos y así se completan los 51 estados y todos los votos electorales están decididos. Carolina del Norte, tal como apuntaban los pronósticos ha caído del lado de republicano y Donald Trump ha sumado 15 votos electorales para un total de 232.
En cambio, Georgia ha roto los pronósticos y le ha concedido sus 16 votos a Joe Biden, que ha ganado el estado para los demócratas 28 años después de que lo hiciera Bill Clinton y ha conseguido un total de 306 votos electorales, los mismos que Trump el año 2016.
En los dos estados las diferencias han sido mínimas, sobre todo en Georgia donde Biden ha conseguido 14.000 votos más que su rival y donde, a estas alturas, ya ha empezado el recuento de votos por asegurar el resultado. Esta victoria, como la de Arizona, se ha basado en la movilización de los votantes de las grandes ciudades, como Atlanta y sus suburbios, de marcado perfil joven e hispano.
Hace años que los demócratas se preparaban para este momento, ya que hace varios ciclos electorales que van ganando terreno a los republicanos, un buen ejemplo es la derrota de la candidata a gobernadora Stacey Abrams, que se quedó a un punto y medio porcentual de ocupar el cargo contra el republicano Kemp. Desde entonces su campaña se ha basado en conseguir la movilización de los votantes demócratas, y lo han conseguido.
Para acabar ganando las elecciones, Biden le ha birlado 5 estados a Trump con respecto a 2016: Pensilvania, el estado que le dio la victoria, Arizona, Georgia, Michigan y Wisconsin.
