Los enfrentamientos entre los Chalecos Amarillos y la policía francesa continúan en el sexto fin de semana de protestas en Francia. Esta noche, se ha hecho viral una escena en los Campos Elíseos de París.

Tres agentes intentan recuperar sus motos del suelo mientras son increpados por los manifestantes. La tensión va subiendo de tono hasta que uno de los policías apunta con una pistola a uno de los chicos que tiene a muy pocos metros. La amenaza no parece preocupar a los manifestantes, que se les siguen encarando. Unos segundos más tarde los tres policías empiezan la carga. Además de utilizar las porras, recurren también a los empujones.

A todo eso, el grupo de manifestantes se amplía y empiezan a tirar piedras, hierros y bengalas a los agentes. Incluso un árbol de Navidad. Viéndose rodeados, los agentes van retrocediendo, cogen las motos y se marchan rápidamente, mientras los manifestantes los persiguen corriendo.

Continúa la tensión en el sexto fin de semana

En París, centro neurálgico de las protestas más tensas en las últimas semanas, se han contabilizado hasta las dos del mediodía unos 2.000 manifestantes y unos 24.000 en todo el país. Unas cifras ligeramente más bajas que en jornadas de protestas anteriores. Las fuerzas del orden han hecho 109 detenciones, entre ellas la del que se considera uno de los líderes de facto del movimiento.

En París, los Chalecos Amarillos han ideado una maniobra de distracción. Habían convocado por las redes sociales una marcha lenta en Versalles, pero se han presentado por sorpresa en el Sagrado Corazón, en el barrio de Montmatre.

Con este movimiento, los participantes, que vestían con los simbólicos chalecos fluorescentes, han forzado a la policía a desplegarse rápidamente para acordonar la marcha, que ha bajado desde Montmatre hacia el palacio presidencial del Elíseo. Como el cordón policial no les ha dejado avanzar, se han dispersado por toda la ciudad, incluyendo los Campos Elíseos, donde ha tenido lugar la escena del vídeo.