La tensión en el norte de Europa no para de crecer. Un avión MIG-31 de guerra ruso se ha estrellado este miércoles muy cerca de la frontera con Finlandia. Los hechos se han producido en la región de Murmansk, cuando el aparato ha empezado a perder altura después de que se ha incendiado. Según los datos preliminares, ha caído sobre un lago y las imágenes se han podido ver desde el lado finlandés. La región de Murmansk, situada en el extremo noroeste de Rusia, tiene frontera con Finlandia y también con Noruega. Por ahora se desconoce qué hacía un aparato ruso tan cerca de la frontera finlandesa, si bien hay que precisar que en ningún momento ha salido de Rusia.

Finlandia es miembro de la OTAN desde el 4 de abril, con lo que ya son 31 los países miembros de la Alianza Atlántica. Después de que Hungría y Turquía dieran el 'sí', solo queda esperar a Suecia, que por ahora se topa con el veto turco.

Mientras tanto, la Fuerza Aérea de Alemania ha informado de que varios cazas rusos de reconocimiento han sido interceptados en espacio aéreo internacional sobre el mar Báltico. "Se han interceptado aviones de reconocimiento. Cazas Eurofighter de Alemania y el Reino Unido han identificado tres aviones militares rusos", han informado las fuerzas alemanas en un mensaje en la red. Han especificado que se trata de dos cazas SU-27 y un IL-20, ambos rusos, y han difundido varias imágenes de las aeronaves. "Estos aviones rusos han vuelto a sobrevolar la zona sin señales de transpondedor", han precisado.

La OTAN se encarga de vigilar la seguridad del espacio aéreo en el nordeste de Europa desde 2004. Cada cierto tiempo se ocupa de ello uno de los grandes países, y en abril Alemania pasó el testigo al Reino Unido, pero el ejército alemán no empezará a replegarse hasta el mes de mayo. Esta presencia de la OTAN es porque países como Letonia, Estonia y Lituania, que son miembros de la OTAN, no tienen una gran fuerza aérea.