Uno de los lugares emblemáticos por el judaísmo, la tumba de José, hijo de Jacobo, ha sido atacada por un grupúsculo de palestinos radicales. La tumba se encuentra en la ciudad de Nablus (Sejem en hebreo) en Cisjordania (Samaria), en medio del territorio bajo el control de la Autoridad Palestina, y representa un lugar sagrado para los judíos. La cobertura de la tumba ha sido destruida y quemada, también un candelabro que colgaba, así escalando más la tensión entre Israel y Palestina. Este acto vandálico contra uno de los símbolos del judaísmo se produce en medio de la segunda noche de detenciones por parte de las fuerzas de seguridad israelíes en Cisjordania, a raíz de un ataque terrorista árabe el jueves pasado en la ciudad costera de Tel-Aviv. "No aceptaremos este tipo de ataque a un lugar que es sagrado para nosotros, especialmente la víspera de Pascua", ha dicho el primer ministro de Israel, Naftali Bennett.

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El ataque perpetrado por radicales palestinos ha sido contra la tumba del patriarca José, un lugar venerado desde hace más de 3.000 años por los judíos, pero también por los cristianos y los musulmanes. Los radicales han vandalizado un lugar donde José -una de las figuras mayores del Antiguo Testamento- fue enterrado según marcan las antiguas tradiciones. Este mausoleo se encuentra justo en medio de la zona bajo la Autoridad Nacional Palestina, con que tiene pleno control como zona A por los Acuerdos de Oslo, pero que varias veces al año, según este tratado, tienen que facilitar el acceso a los judíos para que puedan también rezar ahí. Es por eso que visitan la tumba en ocasiones con una veintena de autobuses, que llegan bajo escolta de soldados israelíes.

Lo youtuber agentino-israelí Sergio Bacari ha mostrado cómo es una de estas visitas previstas por los Acuerdos de Oslo a la tumba de Josep, y la peligrosidad que tiene, porque no siempre es respetada por los árabes.

La historia de José, que ocupa un lugar central en el Antiguo Testamento, marca el comienzo de la expansión de las doce tribus de Israel a tierras extranjeras, antes de la liberación final de la esclavitud con Moisés. Para muchos judíos, José fue el "primer sionista", capaz de ser fiel entre los infieles. Para los cristianos, guarda relación con Cristo, que vivió con José en el exilio de Egipto y también fue vendido por sus hermanos. El ataque al lugar sagrado judío en plena Pascua ha avivado las tensiones religiosas, que ya eran elevadas a causa del mes sagrado musulmán del Ramadán.

"El vandalismo de la tumba de José es un acontecimiento grave y una grave violación de la libertad de culto en uno de los lugares más sagrados para todos los judíos. Viola los sentimientos de toda la nación judía, especialmente cuando se produce durante el mes sagrado musulmán", ha dicho el ministro de defensa de Israel, Benny Gantz. "El Estado de Israel tomará medidas para garantizar que el sitio se rehabilite y se devuelva rápidamente a su estado original. Además, tomaremos todas las medidas necesarias para evitar estos incidentes", ha argumentado.

La Associació Catalana d'Amics d'Israel ha reaccionado al ataque contra la tumba: "Los sitios bajo control de la Autoridad Palestina no son seguros", ha indicado. Esta entidad ha lamentado el acto vandálico contra uno de los sitios sagrados del judaísmo y ha criticado que los únicos lugares santos de Próximo Oriente "preservados, protegidos y de libre acceso para todo el mundo son los de Israel y bajo control israelí".