Andorra ya no tiene ningún paciente de Covid-19 intubado y con ventilación mecánica, según ha informado este martes al ministro de Salud, Joan Martínez Benazet, en la rueda de prensa para hacer balance de la emergencia sanitaria.

El titular de Salud ha añadido que sólo queda ingresado un paciente en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), y que será trasladado a planta en las próximas 48 horas como máximo, después de haber obtenido dos resultados negativos en PCR.

Martínez Benazet ha manifestado que los datos epidemiológicos presentan una situación prácticamente "idéntica" a la de los últimos días: el último contagio registrado se produjo el domingo y no ha habido ninguna defunción en los últimos 10 días.

De esta manera, el total de casos desde el inicio de la pandemia es de 763, de los cuales 676 han superado la enfermedad y 51 han muerto; quedan 36 casos con infección activa, y 8 de ellos están ingresados en el hospital.

"Eso no quiere decir que se haya acabado, pero podemos ser optimistas", ha expresado el ministro de Salud, y ha informado de que la tasa de reproducción de la enfermedad es de prácticamente 0 desde hace días.

A los datos epidemiológicos se sumarán los casos que se diagnostiquen a raíz del cribado masivo a la población andorrana, los resultados del cual de momento no se incluyen en el recuento --ya que no se conocerían de no estar por este estudio-.

1% menos de participación en el test masivo

Martínez Benazet ha recordado que este miércoles acaba la segunda vuelta del test masivo a la población, en el cual se han hecho 61.042 test hasta este martes a las 12 horas; el total de tests practicados es de 129.605 entre las dos vueltas.

Los resultados no difieren mucho de los obtenidos en la primera vuelta, cosa que confirma que en torno al 9% de la población ha generado anticuerpos, y la participación en esta segunda vuelta se ha reducido en un 1% respecto de la primera.

El titular de la cartera de Salud ha explicado que el porcentaje de enfermos es "muy bajo", por lo cual el riesgo de que haya algún contagiado entre las personas que no se han sometido a las pruebas de anticuerpos es pequeño.

Protocolos de control

Para controlar la enfermedad y detectar rápidamente posibles nuevos brotes, el Gobierno trabaja en el diseño de tres protocolos para hacer cribados en poblaciones centinela.

Martínez Benazet ha avanzado que uno de estos protocolos implica a los profesionales del comercio y la hosteleria, y que unos días después de la apertura de las fronteras se dará la opción en los que operan en el núcleo del Pas de la Casa de hacerse una prueba TMA --parecido a la PCR--.

Otro protocolo se refiere a los centros sociosanitarios y geriátricos, donde también se harán cribados a profesionales y residentes, y el último establece cribados en grupos escolares.

A los alumnos que compartan aula se les considerará como un grupo convivente, y por lo tanto no tendrán que llevar mascarilla ni mantener distancias de seguridad dentro del grupo, que tendrá que ser de un máximo de 15 estudiantes por clase.