Mantener una ducha impecable puede ser una tarea complicada. El vidrio de las mamparas acumula fácilmente restos de cal, jabón y humedad. Y, aunque el mercado está lleno de productos específicos, lo cierto es que hay una solución más barata y natural: el vinagre blanco.
Este ingrediente, que muchos tienen ya en la cocina, se ha convertido en un verdadero aliado de limpieza. Su uso no es ninguna moda pasajera. Los profesionales lo recomiendan porque es eficaz, económico y seguro. Además, no requiere mezclas complicadas ni productos químicos agresivos.
El vinagre blanco es ideal para limpiar las mamparas de la ducha
El secreto del vinagre está en su acidez natural. Este componente rompe la acumulación de calcio y minerales que dejan las aguas duras sobre el cristal. Si vives en una zona con este tipo de agua, las mamparas seguramente presenten manchas blanquecinas muy difíciles de quitar. Ahí es donde el vinagre actúa con rapidez.
¿Cómo se aplica? El método más sencillo es rociar directamente las mamparas con una mezcla de vinagre y agua. Después, basta con dejarlo actuar unos 20 a 30 minutos. Durante ese tiempo, la solución penetra en las manchas y empieza a disolverlas. Una vez pasado el plazo, se aclara con agua y se seca con un paño de microfibra para recuperar el brillo original.
Con hacerlo una vez a la semana será suficiente
Algunos expertos incluso recomiendan un truco adicional: empapar papel de cocina en vinagre y adherirlo al vidrio como si fueran parches. De esta forma, el producto se mantiene más tiempo en contacto con las zonas más afectadas por la cal. Tras retirarlo, bastará pasar un trapo húmedo y luego secar bien para dejar la superficie reluciente.
Y ahora, la pregunta clave: ¿cada cuánto hay que hacerlo? Lo ideal es incluir este gesto en la rutina de limpieza semanal. De esa manera, las manchas nunca llegan a incrustarse demasiado. En hogares con agua especialmente dura, se puede repetir dos veces por semana. Y, si se quiere un mantenimiento más ligero, bastará con pulverizar vinagre diluido cada pocos días y aclarar después de la ducha.