La gestión del tiempo en el trabajo se ha convertido en la asignatura pendiente de empresas y trabajadores; optimizar este recurso tan preciado será un objetivo que puede cambiar la forma de trabajar. Buscamos ser más productivos, disfrutar de más horas para crear nuevos proyectos o vivir en este viaje hacia el éxito en plenitud. Incluso uno de los 'coach' y escritores más leídos del mundo, Robin Sharma, defiende firmemente la opción de controlar el tiempo por las mañanas para cambiar de vida.
En este camino que nunca se acaba del desarrollo personal, los pequeños cambios son poderosos. Solo necesitas estos consejos para conseguir control sobre el bien más valioso que los seres humanos tenemos: el tiempo. Toma nota de cómo ser más productivo en el trabajo aplicando estos seis nuevos hábitos que te ayudarán a luchar contra el estrés e incidirán no solo en este espacio de tu vida, sino también a nivel personal.
La organización en listas, prioridades y objetivos es clave para la gestión del tiempo
Las listas de prioridades y objetivos realistas a los que quieres llegar son el primer paso para ser más productivos. Escribe lo que tienes que hacer de forma urgente y los objetivos donde quieres llegar en un espacio concreto de tiempo. Tienes que ser tan realista como sea posible, toda meta tiene sus etapas, con lo cual estas listas te ayudarán a crearlas muy fácilmente.
Dedica tiempo a la organización. A menudo, cuando tenemos muchas cosas que hacer, dedicar tiempo a organizar nos pone nerviosos, queremos avanzar trabajo efectivo. Pero el trabajo sin orden siempre es más ineficaz y perdemos tiempo por falta de organización. Siempre tienes que tener el control de cada tarea, colocarla a tu lista en función del tiempo que tardarás al hacerla y del momento en que la puedas tener terminada. Te sorprenderá el tiempo que puedes ganar invirtiendo un poco en organizar.
Empieza siempre por las tareas más complicadas. A primera hora del día es cuando tienes más energía, coloca en tu agenda lo que consideras más difícil para ti a primera hora o para el primer día de la semana. De esta manera conseguirás una gestión del tiempo en lo que la productividad se verá reflejada más rápidamente.
Busca siempre resultados y dedícate tiempo a ti mismo para ganar en productividad
No contabilices la productividad en horas, sino en hitos conseguidos. Es mejor saber que has hecho todas las tareas en un día que contar las horas que has invertido en este hecho. Lo más importante es el resultado y no el tiempo que dediques. La productividad es una carrera de fondo; al final siempre tienes que acabar ganando.
Las pausas son la clave del éxito. Un rato para pensar puede hacer que vuelvas al trabajo con mucho empuje y acabes resolviendo un problema que tienes pendiente. Los espacios vacíos entre reuniones, una pausa de 10 minutos cada hora, aquel rato en el aire libre en busca de un café, puede ser determinante para evitar los bloqueos. Acabarás ganando en productividad.
Las cosas pequeñas son grandes ladrones de tiempo. Un error a la hora de conseguir una buena gestión del tiempo es dedicar tiempo a las pequeñas cosas que acaban siendo nuestro peor enemigo. El correo electrónico es un buen ejemplo. Si miras el correo cada 5-10 minutos, acabarás trabajando al ritmo marcado de tus e-mails y no del trabajo que tienes para hacer. Revisa el correo cada hora o si puedes, cada dos horas.
Aplica estos consejos básicos y verás cómo tu productividad en el trabajo se multiplica. La gestión del tiempo no solo te ayudará a ganar más dinero, sino también a ser más feliz a tu puesto de trabajo.