Se trata de mantenerse en la carrera. Las elecciones municipales de Barcelona están muy ajustadas. Consciente de ello, de unas encuestas no muy favorables, Ernest Maragall aspira a diferenciarse del resto de aspirantes para intentar volver a ganar, como hizo hace cuatro años. El alcaldable de Esquerra Republicana lo ha hecho en el debate de Betevé con propuestas concretas de su programa electoral, pero también buscando desmarcarse especialmente de la alcaldesa Ada Colau y del exteniente de alcalde Jaume Collboni. Hasta el punto que, una semana después de decir que no haría alcaldesa a Colau, ha dejado claro que no formará "un gobierno donde esté el PSC". En cambio, ha evitado el cuerpo a cuerpo con Xavier Trias.
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Al fin y al cabo se ha evidenciado de forma muy clara en el último bloque del debate electoral, el de la política de pactos. Tan solo arrancar el turno, Ernest Maragall ha querido dirigirse a Jaume Collboni: "Con este PSC no se puede pactar, porque no existe. Solo le quedan el nombre y las siglas". Y el alcaldable republicano ha remachado: "Usted es el PSC del que me tuve que ir, porque dejó de ser socialista y catalanista". Todo, después de que ya dejara claro que no volvería a hacer alcaldesa a Ada Colau. Con respecto a Xavier Trias, le ha acusado de querer pactar con el PSC e incluso introducir el PP en la ecuación.
Vivienda, la prioridad
El jefe de cartel de ERC ha situado el acceso a la vivienda como una de las cuestiones más prioritarias, y ha criticado por este motivo "no se puede convertir en una subasta". Ha resumido su política de vivienda en dos ejes: vivienda nueva y rehabilitación. Aquí lo ha vinculado con su promesa electoral: un fondo de 1.000 millones de euros para rehabilitar 160.000 viviendas. Ha polarizado especialmente con la alcaldesa Ada Colau, porque solo ha hecho un tercio de la vivienda pública prometida y no ha conseguido parar los desahucios. Tanto Colau como Jaume Collboni le han reprochado que la Generalitat no esté aportando lo que le toca a la capital.
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Pacificación con "criterios globales"
Con respecto al modelo de ciudad, Ernest Maragall ha defendido abordar la movilidad "adentro y más allá". En este sentido, ha cargado contra la alcaldesa Ada Colau, que "está haciendo poco y tarde": "No basta con veinte ejes más. Podemos compartir el objetivo, pero no la ejecución". Ha contrapuesto que, como alcalde, actuaría "en los 73 barrios" de la ciudad "con criterios globales". Pero también se ha dirigido al socialista Jaume Collboni: "Rodalies es su gran fracaso". El alcaldable republicano ha responsabilizado tanto al candidato del PSC como a su partido por un servicio "muy lejos de la dignidad". Pero no ha encontrado respuesta de Collboni. A Xavier Trias le ha reprochado que, en su mandato, "parara" la línea 9 de metro. Trias le ha respondido que se hizo "porque no había dinero", pero Maragall ha respondido que lo que faltó fue "iniciativa".
Limitar cruceros, rehabilitar
En el bloque económico es donde Ernest Maragall ha desplegado más parte de su programa. Se ha situado entre el "crecimiento dogmático" de Ada Colau y el "crecimiento ciego" de Jaume Collboni, dos fórmulas que solo han propiciado el "crecimiento de la desigualdad". Frente a esto, ha defendido una diversificación de la economía con más valor. Por ejemplo, en políticas de vivienda, con el fondo para rehabilitar viviendas. "Esto es crear economía", ha defendido el candidato de ERC. Con respecto al turismo, ha defendido que tiene que ser para "regenerar, no para pacificar". En este sentido, ha desgranado la propuesta de destinar los 400 millones del recargo turístico a paliar los "efectos negativos del turismo". Pero también ponerse de acuerdo con el Port de Barcelona y el Govern de la Generalitat para limitar los cruceros de tráfico.
Inseguridad y suciedad
Son dos cuestiones habituales en el debate político barcelonés. Y han constituido todo un bloque del debate de Betevé. Una carpeta que Maragall ha abierto criticando que Collboni "se desentienda de su obra gobierno". Dicho esto, ha constatado que hay varios problemas, como la multirreincidencia o los retrasos en los procedimientos judiciales. Para combatirlo propone "un juzgado en cada distrito" y un "alcalde de noche". En cambio, ha defendido la gestión de la Generalitat, que "ha sobresalido en la dotación" de mossos a Barcelona. Con respecto a la limpieza, ha propuesta un plan de choque: "brigadas de 100 hombres y mujeres que actúen en 100 lugares de la ciudad durante 100 días consecutivos".
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Lengua "abandonada"
En el bloque cultural, Maragall ha lamentado que "el abandono" de la lengua catalana por parte del gobierno municipal ha sido "dramático". Ante esta inacción, el alcaldable republicano ha presentado algunas de las propuestas en este sentido, como la creación de un Comisionado para la Lengua. Pero en un aspecto más amplio ha defendido la necesidad de "ampliar el acceso real a la cultura" de buena parte de la ciudadanía que hoy no tiene acceso.