Tal día como hoy del año 1895, hace 127 años, en Barcelona; moría Josep Oriol Mestres i Esplugas, que había sido el arquitecto del primer edificio que se construyó en el Eixample de Barcelona. Mestres fue el director de la obra de la Casa Gibert, que se construyó el año 1861 en la plaza de Catalunya. La Casa Gibert fue una construcción noble de planta baja y dos pisos rematados con un conjunto de torretas almenadas a la parte superior del edificio. Fue promovida por el negociante Manuel Gibert i Sans (Barcelona, 1795 – 1873), que en el transcurso de su vida fue presidente del Liceu y de la Companyia del Ferrocarril de Barcelona en Mataró.

Inicialmente, la plaza de Catalunya no existía en el Plano del Eixample de Cerdà. Pero la presión popular obligó al Ayuntamiento de la época a destinar aquel espacio al trazado de una plaza. Según el historiador Enric H. March: "Víctor Balaguer en su libro Las calles de Barcelona, publicado el 1865, ya hacía mención de la oficiosa Plaza Catalunya y citaba 'una vasta extensión de terreno que el público ha dado en llamar plaza y que las gacetillas de los periódicos y el vulgo han bautizado con el nombre de "Plaza Cataluña"'. El caso es que la Casa Gibert, fue construida dentro de los terrenos que la posterior urbanización de la plaza Catalunya reservó a espacio público".

Eso provocó que la Casa Gibert tuviera una existencia efímera. Fue derribada en 1895 después de ser aprobada la reordenación definitiva de la plaza de Catalunya. No obstante, tuvo una vida muy activa: durante las décadas de 1870 y 1880, una parte importante del edificio acogió las instalaciones del Colegio de Vilar, creado y dirigido por el profesor Santiago Vilar; y que dependía del Liceo Universitario. Según un anuncio publicitario de la época (1881) en el Colegio de Vilar se impartía enseñanza de párvulos y de Primera Enseñanza; y enseñanzas profesionales de comercio, de idiomas, de "adornos" y de preparación para estudios superiores.