Tal día como hoy del año 1296, hace 725 años, las tropas del conde-rey Jaime II entraban en la villa de Alacant y la incorporaban al reino de Valencia, en aquel momento uno de los cuatro estados que formaban la corona catalanoaragonesa. En el momento en que se produjo aquel hecho, ya hacía medio siglo que la villa de Alacant formaba parte del mundo cristiano peninsular: en 1248, las tropas del rey castellanoleonés Alfonso X habían conquistado la taifa de Murcia, que abarcaba las tierras del valle bajo del río Segura.

Después de aquella primera conquista, los castellanoleoneses no disponían de fuerza demográfica y la repoblación del territorio se había hecho, principalmente, con catalanes y con aragoneses. Por este motivo, cuando las tropas de Jaime II entraron en Alacant, se encontraron una villa catalanohablante. Poco después de la conquista de Alacant, las tropas del conde-rey ocuparon Guardamar del Segura, Elx y Orihuela, que en aquel momento eran dominio de Castilla, pero pobladas por catalanohablantes.

Aquella conquista se produjo en el contexto de la guerra civil castellanoleonesa que enfrentaba a los partidarios del infante Fernando (hijo del rey Sancho IV, nieto de Alfonso X y heredero al trono) con los de Fernando de la Cerda (hijo del primogénito del segundo matrimonio de Alfonso X con Violante de Barcelona-Aragón y, por lo tanto, primo segundo del conde-rey Jaime II). Fernando de la Cerda había convenido con Jaime II la cesión del dominio del reino de Murcia, a cambio de la participación catalanoaragonesa a favor de su causa.