Tal día como hoy del año 1640, hace 381 años, en el contexto de la guerra hispano-francesa (1635-1659) dentro de la Guerra de los Treinta Años (1618-1648), el Ejército de Catalunya rompía las defensas del castillo de Salses (Rosselló) y echaba a las tropas francesas que resistían en el interior. De este modo, la monarquía francesa perdía el control de la última plaza del Rosselló. Aquella batalla, también, sería la última participación catalana en el campo hispánico. Nueve meses después (07/09/1640), los gobiernos de Catalunya y de Francia firmaban una alianza política y militar, el Tratado de Ceret.

Las tropas catalanas que combatieron en Salses estaban formadas por 12.000 efectivos; aunque algunas fuentes elevan la cifra hasta 20.000. Aquella leva estaba distribuida en nueve cuerpos del ejército: tropas de la Generalitat, del Consell de Cent, del duque de Cardona, del marqués de Aitona, y del primer, segundo, tercer, cuarto y quinto provinciales —los maestros de campo Lluís de Peguera, Josep de Rocabertí, Gabriel de Llupià, Ramon Xammar y Agustí de Guilla—. El castillo de Salses, entregado por los hispánicos seis meses antes, era la fortaleza que vigilaba la frontera entre Catalunya y la provincia francesa del Languedoc.

Dos días más tarde, el Dietario de la Generalitat consignaba la victoria catalana en Salses: “Diumenge, a VIII. En aquest die ses senyories (el govern de Catalunya) reberen en lur consistori duas cartas, una del senyor virrey (Dalmau de Queralt, comte de Santa Coloma) y altra del senyor deputat militar (Francesc de Tamarit, equivalent a conseller d’interior en el govern del president Pau Claris) des del camp de Salses, de sis del corrent, ab les quals donen la norabona a ses senyories de com lo enemich francès entregà y dexà la fortalesa de Salses”.