Tal día como hoy del año 1931, hace 87 años, el Gobierno Provisional de la Generalitat, presidido por Francesc Macià y constituido el 14 de abril, hacía pública una nota que anunciaba la designación de la Casa dels Canonges como residencia oficial del presidente de la Generalitat. De esta forma la Casa dels Canonges recuperaba su función histórica que, desde que el 16 de septiembre de 1714 (cinco días después de la ocupación borbónica de Barcelona) el superintendente José Patiño había ordenado, en nombre de Felipe V, liquidar las instituciones catalanas, no había vuelto a albergar la persona y familia de un presidente de la Generalitat. Después de 216 años y 10 meses del decreto de Patiño, Francesc Macià (1931-1933), tomaba el relevo de Josep de Vilamala (1713-1714).

En aquella nota también se decía que se presupuestaba la actualización de aquella vivienda (desocupada desde 1714 y en estado ruinoso) en 50.000 pesetas de la época destinadas a obras y mobiliario. También se decía que aquellas obras tardarían unas semanas en ser ejecutadas, periodo durante el que el presidente Macià (que residía habitualmente en Lleida) se alojaría en el hotel Ritz de Barcelona. Este establecimiento, inaugurado el 1919, era propiedad de la familia Ritz, de origen suizo y muy bien relacionada con Francesc Cambó, el líder de la Liga Regionalista y el gran rival político de Francesc Macià. Pero eso no sería impedimento para que los propietarios ofrecieran alojar gratuitamente a la primera autoridad de Catalunya y su familia mientras duraran las obras de la Casa dels Canonges.

La Casa de los Canónigos vuelve a ser residencia oficial de los presidentes de la Generalitat. La Casa de los Canónigos a principios del siglo XX. Blog Francina Gili

La nota de la Generalitat hacía referencia, también, a una campaña de descrédito que, según rezaba la misma nota, habían activado "ciertos elementos" en relación al gasto de habilitación de la Casa dels Canonges como residencia oficial del presidente de la Generalitat. Y se argumentaba que, pocos años antes (1919-1924), el Ayuntamiento de Barcelona (entonces gobernado por la Liga Regionalista y por el Partido Liberal Fusionista) había invertido más de 8.000.000 de pesetas de la época en la rehabilitación del Palacio Real de Pedralbes, residencia oficial de los reyes de España a la capital catalana. La Casa dels Canonges sería residencia oficial de los presidentes de la Generalitat hasta el fin de la Guerra Civil (1939), y posteriormente desde la restauración de la institución (1977) hasta la actualidad.