Tal día como hoy del año 1641, hace 376 años, tuvo lugar la Batalla de Montjuïc, la más importante de la revolución y la Guerra de los Segadors (1640-1652), y la que marcaría decisivamente el desarrollo del conflicto. La Batalla de Montjuïc fue el punto culminante del enfrentamiento militar entre Catalunya y la monarquía hispánica. Una crisis que se remontaba a seis años antes, y que Olivares, el ministro plenipotenciario del rey hispánico, siempre orientó hacia el campo bélico. Seis meses antes las instituciones catalanas habían iniciado el camino hacia la independencia concertando una alianza con Francia. Y nueve días antes, habían proclamado la República catalana.

La reacción de Olivares fue armar a un ejército de 26.350 hombres (peones, caballos y artilleros) que inició la ocupación del Principat por el sur. Los catalanes presentaron resistencia en L'Hospitalet de l'Infant, en Cambrils y en Martorell. En Cambrils, el marqués de Los Vélez -el general hispánico- protagonizó uno de los episodios más trágicos del conflicto. Después de rendir la plaza con la promesa de respetar vidas y bienes, sus tropas se entregaron a una carnicería dantesca contra la población civil desarmada, que se saldó con más de 700 muertos (el 70% de la población). Era una maniobra enmarcada en la estrategia del terror que pretendía desmovilizar a la resistencia catalana.

El 23 de enero Los Vélez ya había acampado su ejército en Sants y se preparaba para el asalto y la ocupación de Barcelona. El 26 -tres días después- ordenó el ataque dirigiendo parte de las tropas hacia Montjuïc y parte hacia las murallas de Barcelona. En la costa de Montjuïc los fusileros catalanes destrozaron a la infantería hispánica que ascendía a la montaña. Y en las murallas de la ciudad, una acción combinada de los fusileros y los artilleros catalanes y la caballería francesa, hizo el resto. Una victoria con una repercusión internacional formidable que comportó la caída en desgracia de Los Vélez y el principio del fin de Olivares, que sería destituido y desterrado dos años después.