Expulsar a una persona de un avión por overbooking no suele salir gratis. Y todavía menos, si el avión es de una de las grandes aerolíneas cotizadas de Estados Unidos como United Airlines. Tras el escándalo (ya viralizado) de un pasajero siendo expulsado a rastras (literalmente) del vuelo entre Chicago y Louisville, la aerolínea norteamericana está viviendo un mal día en Wall Street y sigue cayendo por encima del 4% en la plaza neoyorquina. Aunque parece que se está recuperando, su dimensión como compañía y su larga trayectoria no son todavía suficientes para paliar un duro golpe frontal que traerá cola a su imagen. 

Otro pasajero del mismo vuelo llamado Jayse Anspach lo ha grabado y difundido por las redes sociales asegurando que el pasajero expulsado es un médico de 69 años que se negó a ser evacuado porque tenía que trabajar al día siguiente. "El médico tenía que trabajar en el hospital al día siguiente, por lo que se negó a ofrecerse como voluntario y United decidió utilizar la fuerza contra el doctor", ha señalado tras especificar que le golpearon la cara contra el respaldo del asiento del pasajero, lo que le causó una "grave hemorragia en su boca".

Todavía más. El consejero delegado de United Airlines, Óscar Muñoz, ha pedido disculpas por un hecho "inquietante" y ha asegurado que ha intentado "hablar directamente" con el implicado para resolver la solución. Pero, su disculpa por "reacomodar" a los clientes todavía ha incendiado más las redes. Y es que más allá de la investigación abierta por las autoridades ratificada por el Departamento de Aviación de Chicago que no aprueba la forma de actuación de los oficiales de seguridad, resuena una marea de boicot a United Airlines. De momento, Wall Street le penaliza con un 4% pero lo cierto es que su tendencia en los últimos 5 años es claramente al alza. Queda por ver lo cara que le sale su mala praxis viralizada.