Telefónica ha ganado 1.241 millones en el primer semestre de 2016, un 42,1% menos que en el mismo periodo de 2015, según ha comunicado la compañía, que ha vuelto a incluir en los resultados a su filial británica, O2, dentro del perímetro consolidado del grupo.

Más concretamente, la operadora ha reportado unos ingresos de 25.235 millones, un 7,1% menos que hace un año, con caídas de las ventas en Alemania, el Reino Unido, Brasil e Hispanoamérica mientras que en España han crecido un 5,4 %. 

En un momento de fuertes presiones para que la operadora revele su estrategia de reducción de deuda tras la frustrada venta de O2 a Hutchison, el resultado operativo antes de amortización (oibda) ha cerrado con 7.756 millones, lo que implica un 6,4% menos. 

Adelante con los objetivos 2016

El presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ha reafirmado los objetivos de la operadora para 2016, incluido un dividendo de 0,75 euros por acción y "el ratio de desapalancamiento en el medio plazo".

Por regiones, la multinacional ha destacado "la alta diversificación del grupo" y ha detallado que España supone el 25,1% de los ingresos consolidados del semestre, seguido de Hispanoamérica (23,8 %), Brasil (20,2 %), Alemania (14,6 %) y el Reino Unido (13,7 %).

A cierre de junio, las líneas totales del grupo ascienden a 347,5 millones, según ha indicado Telefónica, que a su vez, ha destacado que los móviles de contrato crecen a tasas del 6%, las líneas 4G se han más que duplicado, los accesos de fibra y VDSL aumentan el 31% y los clientes de televisión de pago crecen casi el 5%.

Más deuda, más retribución

Ante todo, cabe remarcar que según Telefónica y en línea con muchas otras multinacionales, la evolución de las principales variables financieras está fuertemente afectada por la depreciación de las divisas frente al euro, fundamentalmente el real brasileño, el peso argentino y la libra esterlina

La deuda neta se ha situado en 52.568 millones, es decir, 1.980 millones más frente a marzo de 2016, debido principalmente a la retribución al accionista, que ha supuesto un coste de 1.950 millones. Y en comparación con diciembre de 2015, la deuda neta financiera ha aumentado en 2.728 millones. Algunas de las opciones que se contemplan para reducir la deuda son la generación de caja, desinversiones en otros activos no estratégicos y participaciones, el dividendo flexible y otras medidas potenciales como la emisión de bonos híbridos. 

Por último, el ratio de endeudamiento (deuda neta sobre oibda) se ha situado en 3,20 veces a cierre de junio de 2016 mientras que las inversiones han caído un 33,7 % en 3.654 millones de euros entre enero y junio y se situaron en 3.654 millones.

Alternativas para O2

Las alternativas de Telefónica para su filial británica pasan por mantener una posición de control y deshacerse de "participaciones minoritarias", bien mediante una potencial salida a bolsa de la nueva división de infraestructuras de la compañía o bien, mediante una transacción privada. 

"Estamos abiertos a desinversiones minoritarias" en el Reino Unido, ha asegurado el director global de Estrategia y Finanzas de la multinacional, Angel Vilà, en la conferencia posterior a la presentación de resultados. Seguidamente, ha añadido que mantener este mercado en el perímetro del grupo "incrementa la exposición geográfica de Telefónica" y mejora su cobertura de dividendo. 

"Estamos explorando las condiciones del mercado y estaremos preparados para movernos a toda velocidad", ha concluido.